– Eran parte del orgullo de este país.
Carlos Peña Palacios/EnLíneaDIRECTA
Reynosa, Tamaulipas.- “Así vivimos”, ahora viven con la inquietud de firmar la hoja de los despidos masivos, y mientras eso pasa, se encargan de las composturas de sus vehículos para entregar a tiempo el correo de esta frontera.
¿”Como vivimos”? No tenemos mecánicos, no tenemos refacciones no puedo salir a reparto, que tengo que reparar, no hay presupuesto, si sufro una pinchadura tengo que comprar una cámara para ponerla, en este caso hay que dar una parchada a la moto para salir al reparto“ dijo Rafael Salazar a las afueras de Correos.
A los empleados del Servicio Postal Mexicano no les queda más remedio que convertir en taller mecánico su área de trabajo por las carencias en torno a la oficina de Correos.
¿Checando la batería mi buen? “Si, una pequeña revisada porque nos falla de repente, después andaos batallando con ellas, se apaga no prende, se batalla y hay que estarlas prendiendo con el pedal”.
Las refacciones en camiones, autos, motocicletas y bicicletas deben estar listas para el momento en que la correspondencia sale a su destinatario, y eso, por puro amor a la fuente de trabajo.
“Has de cuenta, aquí hay que hacerlo de todo, ¿Ya parece un taller de llantas que oficina de correos? No hay mas ni para donde hacernos, están los presupuestos abajo y no hay para mandarlos a los talleres y aquí hay que hacerlos“ en opinión de Héctor Salazar.
Y cuando no queda en que transportar la correspondencia, el cartero se vale de lo más próximo aunque cueste unos pesos de la bolsa, pues a veces el micro o a pie se cubren las rutas de la correspondencia en esta ciudad.
