INDEPENDIENTEMENTE de tecnicismos y partidas presupuestarias, todo parece indicar que se ha politizado el proyecto de construcción de una represa en el cauce del río Bravo entre los puentes internacionales Nuevo y Los Tomates.
El anuncio que hiciera, hace exactamente tres semanas, el Mayor de Brownsville, Texas, PATRICIO AHUMADA, en una reunión de amigos, tal parece que ha causado escozor entre gobernantes y funcionarios que tienen que ver con la Comisión Estatal del Agua.
Para las autoridades norteamericanas, la represa contribuiría a asegurar el abasto del vital líquido en las dos últimas ciudades fronterizas de la línea fronteriza entre México y Estados Unidos, además de los beneficios adicionales que traería consigo la explotación con fines turísticos.
Sin embargo, para las Comisiones Nacional y Estatal del Agua el proyecto no es de carácter prioritario para el gobierno mexicano, según el titular en la entidad de esa área, SABÁS CAMPOS ALMODOVAR.
Además, el Director de la Comisión Estatal asegura que el manto freático elevaría su nivel en el lado mexicano, lo que significaría un trastorno para los habitantes en este puerto fronterizo.
En contraparte, PAT AHUMADA quien trabaja en apoyo del proyecto, además de viable lo considera necesario y de beneficio para los residentes en ambas ciudades calificadas como hermanas.
Asimismo, asegura que el gobierno de su país ha invertido unilateralmente 8 millones de dólares tan sólo para verificar la factibilidad del proyecto, lo que ha arrojado un resultado positivo.
La polémica que ha levantado el proyecto de represa en el cauce del río Bravo permite suponer que existen intereses de por medio que han resultado afectados.
Bien sea el simple celo entre munícipes fronterizos, intereses económicos, ausencia voluntaria o involuntaria de formas, o bien un tema que permite desviar la atención de otros, lo cierto es que la declaración de PATRICIO AHUMADA en territorio nacional ha provocado un verdadero revuelo.
La respuesta de CAMPOS ALMODOVAR, quien asegura ha estado presente en reuniones de trabajo referentes a la represa, se antoja un tanto carente de argumentos de peso como para desechar una obra que aseguraría el abasto del vital líquido.
Ahora que, si el proyecto es maniatado como consecuencia de la falta de pesos y centavos ante la crisis económica y recortes presupuestales, eso no echa por tierra las ventajas que representaría una vez que fuese aterrizado.
Por lo pronto, el binacional tema polarizado ha colocado en posiciones encontradas al alcalde brownsvillense PAT AHUMADA y al titular de la Comisión Estatal del Aguas, SABÁS CAMPOS ALMODOVAR.
No es producto de la casualidad que el asunto se haya magnificado y que se pretenda hacer aparecer el Mayor de aquella comunidad como el único interesado en la construcción de la represa.
De entrada, causó irritación que en una mesa de café abordara el tema y criticara la falta de visión sobre el particular de su homólogo ERICK SILVA SANTOS.
No obstante, poco tardó AHUMADA en recibir la respuesta por parte del citado funcionario estatal con la intención de desmerecer su apoyo a ese proyecto.
Tal parece que la andanada mediática lleva como objetivo obligar a que el Mayor de Brownsville guarde su distancia y no aborde ese tipo de temas bilaterales, y menos en el lado mexicano de la frontera.
De lo que no queda ninguna duda, es que la construcción de la represa en el cauce el río Bravo entre los puentes Nuevo y Los Tomates, aseguraría el abasto de agua en temporadas de sequía derivada de cambios climáticos que ahuyentan lluvias de tormentas y huracanes.
El detonante turístico sería un valor agregado, por lo que resulta por demás sospechosa la descalificación de un proyecto que, incluso, ha recibido la inyección de 8 millones de dólares tan sólo para lo que se refiere a la factibilidad del mismo.
Lo dicho, tal parece que la plática de café del texano PATRICIO AHUMADA, hace justamente tres semanas, causó más escozor de lo que se esperaba.
Ni hablar.
DESDE EL BALCON:
La construcción de obras que sólo contribuyan a alimentar algún ego, favorecer económicamente a un determinado interés, o bien tan sólo pasar a la historia con proyectos vistosos más no funcionales y con alto costo de operación, es algo que ya debería estar en el pasado.
Lo anterior viene a colación por las instalaciones del pomposamente llamado Centro Cultural Olímpico, construido durante el sexenio de TOMAS YARRINGTON RUVALCABA y el trienio DE BALTAZAR HINOJOSA OCHOA.
La obra diseñada por la arquitecta SANDRA VERONICA GARCIA CAVAZOS, regidora en el actual ayuntamiento, realmente no ha rendido los frutos deseados en beneficio de la comunidad.
El deterioro en velaria, butacas, equipo de sonido, luces, clima artificial, más la falta de limpieza, es lo que está a la orden del día por, precisamente, falta de presupuesto.
Luego entonces ¿es justo edificar elefantes blancos tan sólo para satisfacer intereses personales?
Es pregunta, que conste.
Y hasta la próxima.
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