Una joven china ha pasado cuatro meses con un cuchillo clavado en la ingle, después de que los médicos no se percataran de que se había quedado en su interior cuando fue objeto de un robo en mayo pasado, informó hoy el diario “Oriental Morning Post” .
La hoja de 15 centímetros de largo y 3 de ancho del cuchillo con el que Shen Ping fue atacada en la provincia de Jiangsu (este del país) el pasado 6 de mayo se partió y quedó hundida en su cavidad pélvica después del asalto, según la fuente.
Los médicos que la trataron mandaron a la paciente a su casa sin sospechar que el filo del arma estaba dentro de su cuerpo.
Shen volvió al hospital para que le hicieran varios chequeos y se quejó de un dolor en la zona donde la habían apuñalado, pero los doctores lo atribuyeron a una infección de la herida.
Sólo después de un escáner por ultrasonidos los facultativos descubrieron que la hoja de metal seguía dentro de la joven.
Esta semana, cuatro meses y dos semanas después de que Shen fuera asaltada, los médicos del hospital Anting de Shanghái operaron a la joven y la extrajeron, finalmente, el cuchillo, añade el diario.