POR LA ESPIRAL/Claudia Luna Palencia

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-Alerta con la melamina
-Nocividad china
-Productos peligrosos

Es increíble que con lo esquemático del comercio internacional, China logre colar cientos de productos de dudosa calidad y primordialmente nocivos para la salud. México confirma la regla.
Hace un par de días surgió una nueva alerta al respecto, esta vez provino del Centro de Investigaciones Avanzadas del Politécnico Nacional, que desde Mérida, Yucatán advirtió que han detectado un producto alimenticio proveniente de China.
Se trata de una crema en polvo para café etiquetada como coffee brake de bajo precio que se vende en tianguis, mercados, tienditas al menudeo, todavía no se sabe si este producto circula en las grandes superficies.
Igualmente, se ignora hasta dónde se ha extendido la venta del producto si sólo está en el sureste del país o ya cruzó todo el territorio nacional.
Por lo pronto se ha dado una alerta de la que por cierto, su publicidad ha sido muy limitada y es que la mercancía contiene melamina, un químico altamente dañino para la salud de las personas que consumen esta crema en polvo para café, afortunadamente uno de los botes fue analizado por investigadores del Politécnico Nacional
Es increíble que México sea un mercado tan fácilmente traspasable en materia de tráfico de productos ilegales, de baja calidad, piratas y que no cumplen con las reglas de sanidad propias y es que no se trata nada más de productos alimenticios, sucede igual con medicinas caducas que llegan desde China, productos para bajar de peso, geles, cremas desmanchadoras o aclarantes de la piel; así como ropa, miles de pacas de ropa usada con millones de gérmenes, bacterias y múltiples contaminantes que la gente desconoce en México.
Tal permisividad en la frontera del país tanto al norte como al sur de su geografía no puede ser síntoma más que de dos aspectos: o tenemos fronteras altamente corruptas y fácilmente sobornables o de plano los sistemas de monitoreo para evitar el contrabando, tráfico ilegal, la piratería y los productos que no cumplen con los estándares requeridos para su comercialización son un fracaso total.
A lo largo de diversos años hemos escuchado de diversas amenazas sobre de la salud de los mexicanos debido a productos chinos de pésima calidad y bajo precio, ello es altamente preocupante en un país que desconoce sus propias cifras y con dudosas estadísticas.
Sabrá dios las porquerías que circulan en territorio nacional, lo que el mexicano se lleva a la boca luego de ser adquirido fácilmente en tantos miles de mercados, mercadillos y tianguis donde la fayuca abunda y toda clase de imitaciones.
Al menos la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) realiza monitoreos al respecto, sorprende que esta vez se haya quedado al margen de advertir a la gente del daño a la salud provocado por el coffee breake chino.
También es muy sospechoso que luego del escándalo de meses atrás provocado por productores de leche en polvo chinos que fabricaron varias toneladas de leche en polvo contaminada con melanina y otros químicos que incluso costaron la muerte de bebés en China, a pesar de que el gobierno chino ordenó la destrucción de dichas toneladas de leche en polvo contaminada, ahora esté circulando una crema en polvo para café con las mismas características.
No sabemos tampoco en cuántos otros países más estén circulando los coffee breake chinos con melamina.
A COLACIÓN
Estados Unidos tiene una lista de sustancias cancerígenas detectadas que se utilizan en la producción de al menos 216 productos de uso común, muchos de los cuales están ligados con el cáncer de mama.
En la lista difundida por Estados Unidos figuran desde disolventes utilizados en los tintes para el pelo, sartenes antiadherentes, medicamentos, aditivos para mejorar el aroma y el sabor de la comida (cuidado con los polvos de caldo de pollo, res, pescado, etc).
En especial hay que tener cuidado con los productos que en sus ingredientes incluyen el benceno y la acrilamida (papas fritas) dos de los químicos más comunes en la compra del súper.
Asimismo, las sustancias químicas dañinas están en los textiles sintéticos, alfombras con tratamiento anticombustible, materiales para la construcción como el PVC, plásticos, barnices, lentes de contacto, pesticidas, insecticidas, suplementos para aumentar la masa muscular, saborizantes de helados, chicles y pastelería; sustancias de limpieza en casa, potentes blanqueadores para ropa, cloros, jabones y detergentes.
En especial, para las mujeres la advertencia es en el uso de hormonas, fármacos para la terapia de la menopausia, anticonceptivos, lociones y champúes.
No perder de vista los ingredientes del maquillaje indeleble, de larga duración, resistentes al agua o al aceite; e insisto, las pinturas para el pelo y las uñas. Cuando estas sustancias entran en contacto con las personas con predisposición genética al cáncer (en especial las mujeres hacia el cáncer de mama), se desarrolla una alta probabilidad de padecer está mortal enfermedad.
El informe de Estados Unidos señala que “las mujeres portadoras de mutaciones en los genes BRCA1 y 2 tienen entre un 50% y un 85% de posibilidades de padecerlo”, al entrar en contacto con cualesquiera de los 216 productos de uso común elaborados con sustancias químicas peligrosas.
En todo caso le sugiero amigo lector, le eche un vistazo al listado completo de carcinógenos en: http://www.silentspring.org/sciencereview
GALIMATÍAS
Otro de los “regalitos” nocivos elaborados en China es el dietileno glycol que en Panamá hace meses ocasionó más de cien fallecimientos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) tiene catalogado al dietileno glycol como sustancia venenosa para el consumo humano.
No obstante, ya sabe usted la poca ética del capitalismo y la baja autoestima de todos los que formamos parte del entramado globalizador, el dietileno glycol es utilizado por los industriales de países generalmente situados en el grupo de los menos desarrollados.
Desde Nigeria, Haití hasta Costa Rica circula la pasta de dientes de la marca “Genial”.
¿Cómo llegó la sustancia prohibida por la OMS? Desde luego por las aduanas. La importación cruzó una vía aduanera y a pesar de la advertencia internacional, dejaron pasar el cargamento que fue utilizado en el proceso de producción de jarabes contra la tos distribuidos gratuitamente por la Caja del Seguro Social en Panamá; en otros países entró por la aduana para la elaboración de dentífricos.
*Economista y columnista especializada. Es candidato a doctor por la Universidad de Alcalá, tiene dos libros publicados y participa en distintos foros de radio y televisión con opiniones sobre educación financiera, economía y finanzas personales. Puede contactarla en: [email protected]

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