Cd. Victoria, Tam.- Desde que se conocieron los resultados de la elección federal pasada, los estrategas del gobierno calderonista debieron haber entendido que la tarea de gobernar sin mayoría entrañaba una dosis mayor de sensibilidad política, respeto a la divergencia y voluntad negociadora.
Quizás no asumieron que ello entrañaría un cuidado mayor de las formas, particularmente cuando se trata de digerir acuerdos que no reflejan cabalmente la postura del PAN pero que, en el terreno de la práctica, representan la única salida viable.
Ciertamente, las posibilidades eran pocas de que el paquete fiscal enviado por el Presidente hubiera pasado íntegro por el filtro plural de las cámaras.
Como en cualquier país del mundo, los distintos grupos parlamentarios hicieron correcciones, parches y enmiendas, resultando así un producto final cuya responsabilidad debieran compartir por lo menos las dos fuerzas más importantes, el PRI y el PAN.
Pero ocurre, que ante el clamor colectivo contra la mayor carga fiscal, el máximo dirigente panista CÉSAR NAVA VÁZQUEZ sacó de su ronco pecho un deslinde inoportuno, culpando a los legisladores del PRI por el incremento a los impuestos.
Lo cual no solamente es una mentira flagrante sino que además oculta que el paquete original salido de Los Pinos era todavía más gravoso para la población.
Y, peor aún, además de su falta de veracidad, el dicho de NAVA resultó inoportuno, con una ausencia de “timing” formidable, pues encendió el debate cuando todavía faltaba la aprobación de la Cámara Alta.
La reacción del PRI no se hizo esperar y bajo la guía del sonorense MANLIO FABIO BELTRONES, la iniciativa topó con piedra y ahora queda sujeta a una revisión exhaustiva donde, por cierto, participará activamente el PRD en calidad de aliado circunstancial del partido tricolor.
Quizás quienes se oponen al aumento de los impuestos deban agradecerle al dirigente albiazul dicho improperio pues hizo tropezar dolorosamente el proyecto de ley de ingresos para el entrante 2010.
Para FELIPE CALDERON el desliz de su pupilo resulta un descalabro inesperado y la posibilidad real de que nuevos parches y correcciones desvirtúen mayormente el espíritu original del documento. ¡Y todo por hablar de más!
Porque, oiga usted, a nadie le gusta que le cobren mayores impuestos y cuando una medida amarga debe ser aprobada por las cámaras, resulta de sobra conocido que ello conlleva un alto costo político-electoral.
El votante castiga a quienes meten la mano de más en sus bolsillos, aún si aceptamos la especie de que se trata de medidas necesarias ante la falta de recursos originada por la crisis internacional.
Solía decir JOSE LOPEZ PORTILLO que “un presidente que devalúa se devalúa”. Igual ocurre con la autoridad que ordena mayores cargas fiscales. Por más necesarias que sean, por bien pensadas que estén, todas duelen.
El no querer compartir el costo electoral, culpando al PRI de todo el paquete, le significó a NAVA una voltereta inesperada.
Ahora el tricolor cambió de rumbo y parece recargarse hacia la izquierda donde lo espera con los brazos abiertos la bancada del Sol Azteca.
En todo caso, lo que aflora es la inexperiencia que, pese a los cambios, sigue presente en la cúpula mayor del PAN.
Se recordará que tras la derrota de julio pasado, CALDERON propinó un regaño fenomenal al entonces dirigente nacional de ese partido GERMÁN MARTÍNEZ CÁZARES, forzándolo a renunciar de manera poco digna.
El señor MARTINEZ se fue precisamente por su falta de oficio para abordar los problemas nacionales con la cordura y la lucidez necesarias. Sus despropósitos agravaron el voto de castigo.
Y bueno, si CALDERON pensaba que con NAVA las cosas serían distintas, todo indica que se equivocó. Los dos, GERMAN y CESAR, parecen cortados con la misma tijera.
Ven el árbol y no el bosque, se dejan llevar por la imagen del momento sin visualizar la película completa y, a la postre, sus reacciones obedecen más al impulso y a la hormona que a un propósito de largo plazo.
Para colmo, el ex-presidente FOX no deja de hablar sandeces que, lejos de afectar a sus adversarios políticos, golpean sobre la deteriorada nave del calderonismo, al decir que los actores políticos involucrados en el paquete fiscal “le hacen al Tío Lolo”.
En su interpretación más amable, el dicho popular aludido por FOX se refiera a quien se hace “tonto solo”, aunque hay otras versiones más ríspidas, poco agradables para el Presidente CALDERON, pues rayan en el insulto.
Por otra parte, el “affaire” que hoy atrae los reflectores hacia la Cámara Alta pone en primer plano a MANLIO FABIO BELTRONES.
Particularmente hoy que la imagen de ENRIQUE PEÑA NIETO parece entrar en una fase de estancamiento.
Al cerrar la semana, un lector muy cercano nos comentaba que hoy se palpa en el país el clamor por una personalidad de carácter en Los Pinos, un hombre de experiencia y mano firme que sepa sortear el vendaval que hoy azota al país en todos los frentes.
Cabe preguntar si PEÑA NIETO, con su tibieza y novatez, llenaría dicha expectativa o hay otras opciones más cercanas a dicho perfil, como, por ejemplo, el señor BELTRONES, cuyas simpatías entre la vieja clase política podrían incluso atraer al sector moderado del PRD.
Finalmente, las circunstancias también cuentan y así como hay aspirantes que resultan viables para climas templados, igual habrá personalidades que se muevan mejor en tiempos de turbulencia.
BUZON: [email protected]
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