El Senado de la República se encuentra analizando el paquete fiscal para el 2010, aprobado por la Cámara Baja. De entrada, la mesa directiva afirmó que se realizarían algunos cambios, pero le han dado vueltas y vueltas, sin encontrar la cuadratura.
Seguramente después de un par de discusiones más, de algunos gritos y un poco más de circo legislativo, en esta semana quedará ya…tal y como está. Parece que es una consigna que ya no se mueva más y para ello se formalizó la alianza Presidente-PAN-PRI, así que está por demás lo que digan los minipartidos. Ya lo vimos la semana pasada, simplemente se aplica la aplanadora, al someterse a votación y con esa alianza se aprueba por mayoría, para que se quiere la unanimidad, eso también tiene un costo que parece que ni Calderon, ni el PAN o el PRI quieren compartir.
Definitivamente que en esta alianza hay ganancia de por medio…y el tiempo nos dirá el costo que tendrá que pagar el Presidente por el apoyo de los priistas, ya que en este mundo nada es gratis.
Por ciento han comenzado a circular por la red una serie de cadenas pidiendo unirse a la protesta virtual por las medidas adoptadas por el ejecutivo y el legislativo. Uno de estos correos enlista los nombres y correos electrónicos de los diputados federales que votaron a favor del IVA del 16 por ciento y demás reformas que perjudicarán a la sociedad y, ¿qué creen? Ahí están todos nuestros “representantes” tamaulipecos, esos que hace menos de 4 meses vinieron a nuestras casas pidiendo el voto para ir a luchar por nuestros intereses al Congreso de la Unión…ninguno escapó de esta lista, la consigna fue clara, todos levantaron la mano para asestar el golpe al pueblo, sin titubear.
Los legisladores tienen tres años para vivir holgadamente de la nómina. Tienen su sueldo asegurado por 150 mil pesos mensuales, más viáticos y gastos de representación que incluyen boletos de avión, teléfono celular, oficina de gestión, llamadas en el recinto oficial, alimentos durante los días de sesiones, etc.
Otra cadena es una propuesta popular o quizá debo de decir una carta a Santa Claus, debido a que piden a los diputados federales votar para que se les disminuya el sueldo en un 50 por ciento, debido a que es un abuso y una burla que el salario mínimo sea menor 3 mil pesos mensuales, con jornadas de trabajo de 8 horas diarias, mientras que hay puestos públicos en los que se vive como reyes, sin el título mobiliario.
Este documento que está circulando en la red, y que colocaré en mi FACEBOOK por considerarlo importante, por lo menos que los ciudadanos manifiesten su inconformidad ante tanto abuso, es un buen punto de partida para esta reflexión, ya que además el buen juez por su casa empieza, y los diputados federales deben predicar con el ejemplo. Luego de corregir los males en casa, mirar hacia el ejecutivo y ajustar cuentas también; finalmente terminar por meter en cintura los gastos excesivos del poder judicial. En México tenemos servidores que lujo que trabajan como burócratas, ni siquiera podemos presumir que todo lo que pagamos está bien invertido. Los niveles de corrupción están en porcentajes que dan vergüenza y el servicio que nos ofrecen es malísimo.
En esta apreciación se incluye al Presidente que también nos tomó el pelo, con su promesa de campaña…no solo no respetó su compromiso de bajar los impuestos y desaparecer el pago de la tenencia vehicular, sino además, quiere que la sociedad pague los desatinos y malos manejos administrativos de esta y las anteriores administraciones.
Esta por demás decir que los Gobiernos estatales y en este caso sus voceros en las oficinas fiscales se aferran a pelear los recursos que ingresan, por un impuesto que nació en 1968 de manera provisional y afirman que si se elimina este tipo de recaudación, disminuirán considerablemente las posibilidades de aplicar la obra pública o bien de proporcionar los servicios públicos a la población.
Es la población la que paga los platos rotos de cada uno de los desaciertos financieros que han tenido las administraciones municipales, estatales o federales.
La inconformidad de la población crece ante la falta en el cumplimiento de los compromisos de campaña, nos prometieron gestionar reducir las tarifas de energía eléctrica, y hasta ahora lo más cercano a esa información es la desaparición de Luz y Fuerza de México –que nada tiene que ver con el tema-.
La población ya no tolera más impuestos, más padrinazgos, más patrocinios y más golpes a su bolsillo. Cada acción causa una reacción y por ello, no solo Felipe Calderon deberá asumir las consecuencias de sus propuestas económicas y de sus errores financieros, lo mismo deberá hacer el PAN y el PRI cuando sus representantes que afirmaron no permitirían el 2 por ciento a medicinas y alimentos, pero aprobaron lo que es el inicio de una escalada de precios y debilitamiento de la economía familiar con los incrementos a impuestos, que se aplicaran a contribuyentes cautivos. Casi me recuerda aquella frase conocida por muchos “defenderé el peso, como perro”, y luego sobrevino la devaluación…seguimos en lo mismo.
El costo político es innegable, pero la apuesta es a que el pueblo no tiene memoria y para el año entrante cuando vengan a pedirnos el voto, seguramente ahí estaremos nuevamente en la grilla. Otros más seguramente, no asistirán a votar con lo cual consumamos lo que ha prevalecido en México, el abstencionismo ¿Hay otro camino, para manifestar nuestra inconformidad?
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