Hugo Reyna/EnLineaDIRECTA
Reynosa, Tamaulipas.-Inicialmente hace unos pocos años en la ciudad en forma furtiva aparecieron altares o espacios considerados como “sagrados” para rendir culto a la santísima muerte, sin embargo el auge incrementó la presencia de dichos santuarios y hoy en día proliferan por doquier, al menos dos de ellos destacan en importancia y se encuentran en la carretera Ribereña al poniente de Reynosa.
Aunque el culto a la santísima muerte no cuenta con aval de la Iglesia Católica que lo considera impropio, al menos en el país se estima que existen poco más de 2 millones de fieles a la “catrina”.
En la curva del Morillo rumbo a Reynosa Díaz, se encuentra contiguo al altar de la Virgen de Guadalupe, un altar dedicado a la muerte que ya tiene varios años de haber sido abierto, este fue fundado por Don Santiago Vásquez que hace un par de años falleció (lo curioso es que el viejo protector del culto a la muerte, murió trágicamente en un accidente carretero).
En ese altar acuden fieles de todas las clases sociales, quienes mortificados por sus angustias piden ayuda extra a la muerte para que les permita resolver sus apuros y protección a cambio de ello se le ofrecen ofrendas de toda clase para pagar el favor recibido.
Lo mismo sucede en otro santuario a la santísima muerte que se encuentra adelante del centro recreativo “La Playita” en la carretera ribereña, en donde acuden fieles a solicitar intervención de la santísima y rogarle por su respaldo ante sus peticiones.
Este 2 de Noviembre (Día de Muertos) se festeja a la santísima muerte y como patrono de sus seguidores se le lleva serenata con las mañanitas, se convive con ella y se acude a rendirle respeto y agradecer por todo lo recibido.
