-Leyenda que nació de la tragedia
Hugo Reyna/EnLineaDIRECTA
Reynosa, Tamaulipas.-
Fue hace muchos años cuando el ex presidente municipal de Reynosa Don Rodolfo Garza Cantú, permitió y de hecho avaló la idea de que se construyera un altar dedicado a la Virgen de San Juan de Los Lagos, hombre de arraigada filiación religiosa, apoyó la construcción y para ello cedió un tramo de sus propiedad y dejar para la posteridad el sitio de culto y veneración que hoy es: La Virgen del Morillo.
Sin embargo, de manera alterna al punto de concentración religioso, otra leyenda se ha edificado y que es la que mayormente concentra la atención de los lugareños aledaños al paraje.
La carretera ribereña, ha sido trágica en muchas etapas de la historia reciente, ha sido protagonista de sangrientos accidentes, en donde muchas personas de todas las edades han perdido la vida.
Oscuridad y falta de señalamientos, así como la precaución han sido factores esenciales para darle a la Curva del Morillo, la fama de mortal que ha acumulado en estos años.
Precisamente en el tramo que inicia del Centro Recreativo “Doña Litha” propiedad de la Familia Garza Peña, hasta cruzar el Drén El Morillo, la muerte ha tenido un santuario, en donde ha recogido la vida de muchos.
A un costado del citado tramo peligroso vial, se encuentra la Virgen del Morillo y es ahí donde el folclore popular ha volcado la creencia y rendir tributo a familiares, amigos que han perdido la vida en el asfalto que corre implacable.
Por los alrededores de la Virgen del Morillo, se observan ofrendas como fotografías y ropa, así como artículos que fueron propiedad de los difuntos.
Como un rito pagano, se venera el recuerdo de los muertos con algunas de sus prendas que son ofrendadas a la Virgen de San Juan de Los Lagos, una muestra de devoción y fe que no tiene par.
Las familias del Ejido Cavazos, cercano a la Virgen del Morillo, cada noche son asaltados por la duda y el misterio: ¿Quién enciende las veladoras que súbitamente están prendidas y que pareciera que “alguien” lo hace, el asunto es que nadie sabe quien es.
Litha Garza Peña, hija de Don Rodolfo Garza, parece tener la respuesta, del mantenimiento y limpieza del santuario se encarga un señor, pero no precisa exactamente de quién se trata, es alguien que ha trabajado para la familia desde hace mucho tiempo.
Empero, la labor que ese samaritano, debe dejarlo exhausto cada noche, pues encender alrededor de un centenar de veladoras no es para menos, amén de la limpieza y conservación de las ofrendas, ropa, calzado, fotos, artículos diversos, toda una hazaña, aun más cuando en días de lluvia y viento, las veladoras prevalecen encendidas como si nada, tal como un pacto de respeto e inmunidad de la naturaleza con la Virgen del Morillo.
No han sido pocos los testimonios recogidos de lugares y automovilistas que por las noches oscuras y de Luna, de pronto aparecen figuras difusas por el santuario e incluso por la Carretera.
Muchas historias de fantasmas y aparecidos se han tejido, se habla del caso de una joven novia, que no llegó a casarse, pues murió en un accidente automovilístico en el rumbo, al igual que muchos más.
Unos desafortunados trabajadores que venían de la maquiladora y cuya unidad en que viajaban se volcó muriendo más de una decena de ellos, entre las tierras del monte y el cerro del Morillo, se pueden observar recuerdos de aquella tragedia.
Algunos dicen que cuando pasan por las noches, por ahí se escuchan lamentos y alaridos de dolor, se observan sus almas en pena, dicen los lugareños que son creyentes a rabiar y respetuosos de los hechos que solo Dios sabe, dicen.
Pero tampoco faltan las chispas de ingenio y humor que se producen en la jerga popular, la “raza” dice que cuando los días de fiesta se realizan ofrendas y servicios en honor de la Virgen de San Juan de los Lagos, se depositan monedas y billetes a los pies de la Virgen, cuando se acaba la celebración y todo mundo se marcha, llega de pronto Don Rodolfo Garza Cantú, entonces toma el dinero de las ofrendas y como una salomónica forma de repartirlo, avienta la charola al aire y muy serio dice :”Virgencita toma lo que es para ti y lo que caiga es mío”.