Carlos Peña Palacios/EnLíneaDIRECTA
Reynosa, Tamaulipas.- El primer villancico de esta próxima Navidad fue cantado por las promesas de la Casa Vicentina de Paul.
Usted ya había oído hablar de ellos, recuerda aquellos niños que no hablaban de Dios sino que hablaban con El.
Ante las esposas de los médicos de la ciudad con frontera también conocidas como damas vicentinas fue más que una presentación, pues nos recuerda que aun cuando todo se encuentra en oscuridad la esperanza es encender una luz.
“Más que nada la alegría de verlos que están saliendo adelante, es algo que no se puede calcular cuanta alegría tenemos” comentaba Emanuel Reyes, un Padre de Familia.
“Lo único que les puedo decir este trabajo es una muestra de lo que podemos lograr nosotros como educadores con el apoyo tan grande los papas y nuestro trabajo, lo podemos hacer y arriba los niños especiales” culmino el evento la Directora Alejandra Méndez.