-Otro modelo de trabajo
-¿Adiós al aguinaldo?
-Profedet vigilará cumplimiento
Expertos en el tema laboral advierten de una metamorfosis de la que aún no se repara en analizar el impacto social que ésta traerá, por un lado las políticas públicas están rebasadas para formular un esquema de absorción de la mano de obra y de los profesionistas disponibles en el mercado; por el otro, la tendencia lleva a abaratar la contratación, los despidos y darles más facilidades a las empresas para tener costos laborales más económicos.
La idea del empleo maquilador, a destajo, freelance y de outsourcing implican para las empresas grandes ahorros en costos fijos porque no es lo mismo tener una nómina mensual fija a la que además hay que pagar IMSS, aportaciones a la Afore, aguinaldo, reparto de utilidades, prima vacacional, gravidez etc.
Se busca una relación empresa-trabajador de manera informal, impersonal, menos comprometida, los empresarios aducen que es la única forma de competir en el mar de la globalización amparados por políticas laborales que les permitan reducir sus costos fijos.
Los pasos dados en este sentido obviamente van dejando muchas secuelas sociales y tienden a fortalecer la economía informal y no es un mal exclusivo de los países subdesarrollados, el Banco Mundial señala que países de primer nivel como Suiza tienen una economía informal equivalente al 8.8% del PIB.
Según datos de 2007 cuando no había reventado esta crisis económica mundial sin parangón, el propio organismo internacional reveló que países de la OCDE como Italia, Grecia y España alcanzaban tasas alarmantes de informalidad: 25%, 24.8% y de 22.6 por ciento, respectivamente.
Para las economías de América Latina los niveles de la informalidad desdibujaban el avance de la metamorfosis del mercado laboral dejando como resultado el surgimiento de “otra economía paralela a la formal”, esto es, en 2007 el promedio de la economía informal respecto al PIB regional era del 45 por ciento. México y Brasil tenían el mayor peso.
Con el estallido de la crisis, la informalidad es el gran receptáculo de los desempleados, muchos estudiantes recién egresados de las universidades, amas de casa o pensionados.
También la crisis se ha convertido en un “pretexto perfecto” para las empresas que, aduciendo razones de urgente necesidad de reducir costos fijos están llevando a cabo varias acciones: congelamiento de sueldos, salarios y remuneraciones; despido y recontratación de trabajadores con contratos distintos a los que originalmente tenían las plazas y los tabuladores, algunos aceptando mantener el empleo con menos ingreso e incluso sin las prestaciones que tenían; liquidaciones en tabuladores de alto ingreso; cancelación de prestaciones; desaparición de áreas con trabajadores con contratos fijos para contratar servicios de outsourcing.
La crisis lo está haciendo una moda peligrosa, hay millones de personas en la calle disponibles para aceptar las condiciones que las políticas laborales y la iniciativa privada le impongan.
En España, por ejemplo, el sábado aconteció en Madrid una marcha multitudinaria convocada por sindicatos, centrales obreras, personas desempleadas para exigirle al gobierno socialista del presidente José Luis Rodríguez Zapatero “que los empresarios no se aprovechen de la crisis abaratando el empleo”.
Este fin de año sin lugar a dudas será uno de los peores en muchas décadas para millones de hogares en España, México y el mundo entero, no habrá nada por celebrar más que concluir un año con varios meses en el paro, acumulación de deudas, hambre y muchas tensiones en el hogar porque sin dinero no se pueden pagar los servicios, ni se puede dormir tranquilo.
GALIMATÍAS
En México, la Secretaría del Trabajo reconoce que habrá muchas empresas con dificultades para pagar el aguinaldo a sus empleados y otras imposibilitadas de hacerlo por la misma situación de caja interna.
El mal desempeño de la economía mexicana este año ha golpeado a micros, pequeñas, medianas y grandes empresas. Muchos son negocios familiares manejados, operados, administrados y atendidos por sus miembros.
En las medianas y grandes empresas tienen compromisos que cubrir al menos con la parte de los empleados con contratos formales, algunas no dieron reparto de utilidades este año, van a cerrar con números rojos y al parecer el reparto de aguinaldos será casi imposible.
La justificación son los propios balances: caída en las ventas, litigios con los acreedores por pagos vencidos y el estancamiento total de la empresa.
Querámoslo o no será una amarga Navidad, el cierre de un año desastroso, vivir en “la crisis de la crisis” como señala Carlos Ramírez, nos ha obligado a ser austeros. Todo un reto para que detonemos nuestra creatividad para salir adelante porque será la única forma de hacerlo buscando oportunidades pero no en las empresas porque éstas no tienen forma de ofrecerlas.
Que en 2010 el propósito sea el de crear una micro o pequeña empresa, de autoemplearse de manera formal brindando además la oportunidad de crear empleo.
Estoy convencida que en la micro y pequeña empresa se mantendrá vivo el espíritu del trabajo formal, la generación de valor, la búsqueda de oportunidades, la aportación a la sociedad. Será la única manera de compensar la política inversa de las empresas.
SERPIENTES Y ESCALERAS
La Procuraduría Federal para la Defensa del Trabajo (Profedet) insiste en que antes del día 20 de diciembre todas aquellas personas que tienen una relación laboral deberán recibir el pago de su aguinaldo (por lo menos 15 días de salario) según lo establece el artículo 87 de la Ley Federal del Trabajo.
La Profedet indica que vigilará que esta prestación anual se cumpla en todos los términos “no hay pretextos para no hacer válido este derecho”.
Fundamentalmente el pago del aguinaldo aplica indistintamente para todas aquellas personas que prestan un servicio personal subordinado a otra persona física o moral en una relación laboral.
Los trabajadores que no hayan cumplido el año, independientemente de que se encuentren activos o no, de igual forma tendrán derecho a que se les pague la parte proporcional.
Todos los trabajadores tienen derecho al pago del aguinaldo siempre que efectivamente exista una relación laboral, independientemente del acto que le dé origen.
Para cualquier duda le aconsejo que llame al 51 34 98 00 o en la línea sin costo 01 800 911 7877.
*Economista y columnista especializada. Con estudios de doctorado por la Universidad de Alcalá, tiene dos libros publicados y participa en distintos foros de radio y televisión con opiniones sobre educación financiera, economía y finanzas personales. Puede contactarla en: [email protected]
