Después de la fiesta una amarga realidad

0

Benny Cruz Zapata/EnLíneaDIRECTA

Victoria, Tamaulipas.- Con una ola de aumentos en los precios de productos y servicios, el inicio 2010 no podía ser más desalentador en el ánimo colectivo donde la fiesta ha quedado atrás y la realidad se impone cargada de desesperanzas para muchos, que como don Filomeno García Martínez de la colonia Pepenadores, lustrador de, quien afirma que empezó el año con el “santo de cabeza” pues este inicio de año muy apenas ha sacado para llevar las tortillas a la mesa de su casa.

-Para gente como uno que vive al día, las cosas no pintan desde ahora nada bien, cerramos el año gracias a Dios con unos buñelos en mi casa, la pasamos bien porque mis hijos que trabajan de albañiles se juntaron en la casa, pero ahora sin un peso en la bolsa estamos solo con la esperanza de que a un cristiano se le ofrezca bolearse los zapatos, con uno solo ya sacamos los 25 pesos necesarios para las tortillas y medio kilo de huevos, porque aunque en la casa ya solo somos mi esposa y yo, vivimos únicamente de mi trabajo y está bien canijo.

Lamenta que los años se le vinieron encima y su oficio de bolero apenas le dio para medio vivir y a sus 55 años no tiene más ingreso:
-Por eso la verdad que sí nos da miedo, porque la comida cada vez está más cara y en nuestra situación no podemos cobrar más, porque si de por sí las personas le piensan para limpiarse los zapatos con nosotros, si aumentamos pues de plano las vamos a alejar, es por eso que cobramos entre 25 y 30 pesos, pero si vemos que les faltan cinco pesos, dejamos hasta los 20 pesos el servicio.

No es el único, el sentir es colectivo en quienes tienen en el trabajo informal su única fuente de ingresos, dependiendo del antojo callejero su sobrevivencia, la señora Leticia Reyna, quien habita junto a sus tres hijas pequeñas la casa número 3321, de la colonia Ayuntamiento:

-Para nosotros no hubo fiesta ni nada, y eso que tengo dos trabajos, pues además de la venta de churros –en la esquina del siete Hidalgo- trabajo de obrera, pero sostener una familia con 600 pesos a la semana es imposible, por eso todos los días me salgo con mis niñas a completar el sustento, mientras la más grandecita a sus 14 años me ayuda en la venta, las otras más chiquitas de seis y siete años de edad, le ayudan a otros vendedores ambulantes que les dan los 10 y a veces hasta los 20 pesos, todo lo que sacamos lo juntamos y así, cuando menos la comida no nos falta.

Afirma que para sus niñas ni en el Día de Reyes esperan regalos, pues si la navidad no les trajo nada, a estas alturas es poca la esperanza.
-Pero no nos quejamos, lo que nos da miedo es que a pesar de lo que trabajamos hay ocasiones en que toca pagar el recibo de agua o luz, andamos batallando hasta para el pasaje que pagan las niñas para llegar a la escuela.

Agrega:
-Ojalá que el gobierno se pusiera la mano en el corazón y volteara a ver la realidad de los más necesitados, de esos que ni la comida tenemos segura, en nuestro caso la venta de churros es lo que nos ayuda, pero a veces nos llega la de malas y los inspectores de la Presidencia Municipal nos corren con todo y canasto, además no se tientan en alma al momento de cobrarnos la cuota de piso.

Enfatiza:
-Deberían de tomar conciencia y dejarnos trabajar en paz, pues la situación más que si no salimos a la calle, o nos morimos de hambre o nos metemos de rateras, pero como no queremos hacer esto, mejor que nos ayuden a trabajar tranquilas.

Ellas y ellos, no son los únicos, sus historias son similares para miles de tamaulipecos que ven el inicio del presente año con incertidumbre, de ello da cuenta el economista Adán Moctezuma Vega, quien exhorta a la población en general a mantener la calma:

-Lo que se vive y lo que se está por venir no es ni será nada fácil, por ello, cada cual en lo individual, debe echar mano de las herramientas que tiene a su alcance, sin duda alguna el tener doble oficio, doble o hasta triple trabajo es el común denominador de lo que se vive y en este sentido vemos que cada vez más son las mujeres y hombres que tienen en el comercio informal su sobrevivencia y es que aun cuando Tamaulipas la generación de empleos no se ha detenido, estos aún no son suficientes para atender la demanda que se tiene.

Agrega:
-Por eso, es que se ve que cada vez más gente se autoemplea o complementa sus ingresos con la venta o la prestación de algún servicio, es un año difícil pero no podemos entrar en pánico sino planear bien nuestra economía doméstica.

(Visited 1 times, 1 visits today)