-Lo sorprende su amasia con otra y en su propia casa y cama.
David Díaz/EnLíneaDIRECTA
Reynosa, Tamaulipas.-Descubierto en su propia cama y su propia casa, una ingenua mujer denuncio a su pareja sentimental, por haber encontrado a su rival de amores y a ese inmoral haciendo actos impúdicos desenfrenados, por lo que ahora la infidelidad que cometió no se lo perdonara nunca, por lo que la afectada exige separación inmediata y que se pudra en la cárcel.
Lo que en años anteriores fuera todo dulzura y mieles, ahora es todo odio y rencor, ya que una mujer al arribar a su domicilio se encontró con la sorpresa que su marido se encontraba haciéndole desenfrenadamente el amor a una mujer quien desconoce y que se supone es amante del ahora detenido.
Ante el oficial de barandilla el infiel sujeto responde al nombre de José Héctor Maya Pedraza, de 60 años de edad, quien radica en Callejón Pinos, número 203, de la colonia Ernesto Cedillo.
Fueron los oficiales de la Policía Municipal, Luis Cano Cardiel y José Patlan Palafox, quienes acudieran al llamado de la señora Antonia Ortega Trejo, de 43 años de edad, quien radica en el mismo domicilio.
Angustiada y enojada dijo a las autoridades que ella se dirigía a su domicilio cuando encontró la puerta muy cerrada y que al abrir fue a la recamara para descansar, pero cual fue su sorpresa que se encontrara a su propio esposo con una mujer y que estaba haciendo desenfrenadamente actos impúdicos aun que del detenido lo dudo, ya que es muy impotente y ya nada de nada.
La quejosa se lleno de coraje y le reclamo el por que estaba haciendo eso y por que le pagaba tantos años de amor que habían compartido de esa manera, por lo que en respuesta el vejete cachondo, en respuesta le dijo que se fuera a la fregada y la amenazo de muerte, por lo que ahora la denunciante pide se largue de su casa y no lo quiere ver mas.
El Juez Calificador de turno, tomo conocimiento del caso y consigno al viejito guarro, quien ahora se encuentra en una difícil situación, por que ni amante, ni esposa y casa tendrá ahora, sino cárcel por un buen tiempo por andar poniéndole los “cuernos” a su vieja en casa que no es de su propiedad.
