Luego de una tediosa instalación de un membrete de Nuevo Laredo, que duro cerca de media hora, que sería utilizado después por el alcalde Ramón Garza Barrios para ofrecer una conferencia de prensa, el director de tránsito, Jaime Aguilar, y el doctor Jaime Gutiérrez, jefe de la jurisdicción sanitaria, dieron a conocer los nuevos equipos para medir el nivel de alcohol en la sangre de los conductores.
La medida es buena, si se quiere pensar que todos los agentes de tránsito son honestos, pero como no es así, y porque este tipo de aparatos solo funcionara en las instalaciones de transito, en el lapso de tiempo que transcurrirá desde el lugar del accidente hasta donde se encuentre el aparato, será tiempo suficiente como para que el conductor ebrio pueda llegar a un ‘arreglo’ o ‘acuerdo’ con el oficial de tránsito corrupto, y no ser enviado a la Dirección de Seguridad Vial, en donde se le aplicara el examen.
Esto no ocurrirá si como digo, un agente fuera honesto, pero debo creer que al menos la mitad de todos si lo es, por lo que creo que la efectividad de este programa será solo del 50%, porque el restante 50% se prestará a actos de corrupción, ya que un agente vial no querrá trasladar por su cuenta y tiempo, aun ebrio hasta la demarcación vial, solo para que se le aplique un examen el que no obtendrá beneficio alguno, por lo que la práctica de la extorsión será a mi juicio, la extensión de la que se lleva a cabo actualmente.
Pero debo aclarar, no todos los agentes viales son tan malos y tan corruptos como la gente piensa. Aunque debo decir que la mayoría si lo son, y pongo como ejemplo a dos amigos míos que trabajaron en la corporación, y quienes fueron despedidos de manera injusta, solo por ser honestos.
En esa misma conferencia en la que Ramón garza dio a conocer estos equipos, tuvo que reconocer que el viernes pasado desconocidos arrojaron artefactos explosivos a las instalaciones de la policía municipal, conocidas como base 1 y Central, aunque después haya dicho que en la ciudad no pasa nada y que todo está tranquilo.
Pero tanto el gobernador Eugenio Hernández Flores como su secretario de seguridad pública, José Ives Soberon, reconocieron que en la entidad los niveles de inseguridad se elevaron de manera alarmante, tanto que solicitaron al gobierno federal el envío de 440 efectivos de las fuerzas federales para el apoyo de los municipios de Matamoros, Reynosa, y Nuevo Laredo.
Cambiando de tema, en el PRI aun existe la duda de que el dirigente estatal de ese partido, Ricardo Gamundi Rosas, se vaya a coordinar la campaña de Rodolfo Torre Cantú, porque existe la posibilidad de que se vaya a la secretaría de gobierno, toda vez que Antonio Martínez Torres ocupara la cartera de diputado local. Habrá que ver entonces como termina este complicado ajedrez político en el mapa electoral de la entidad.
Pero en el PAN las cosas no están tampoco definidas, aunque debo decir que están más que complicadas, ya que en esta ciudad aun no hay nada para nadie, y las rencillas por el control del partido, mantienen en férrea lucha a los dos grupos que se disputan el control y dominio de los cargos de elección popular por disputar. En ese contexto, hasta el momento el ganon sigue siendo el regidor Jorge Ramírez Rubio, mientras que el perdedor será sin lugar a dudas el ex diputado local Everardo Quiroz, quien ya se registró como pre candidato al gobierno municipal.
Y hablando de registros, el perredista y representante de una fracción del PRD, Francisco Chavira Martínez, estuvo en la capital estatal, ¿y sabe usted para qué?. Para registrarse como precandidato para el gobierno de Tamaulipas, aunque debo preguntar si este personaje esta consciente de que sus posibilidades de ganar las elecciones del 4 de julio, son tan lejanas como la distancia que existe de la galaxia más lejana a nuestro sistema solar, de la tierra.
Pero son solo sueños guajiros cuyos protagonistas saben bien que con el solo hecho de participar, se llevaran a la bolsa una buena tajada de dinero, y es bien sabido que el único interés que motiva a los candidatos de cualquier partido político, es el manejo de las partidas presupuestales en temporadas electorales, amén del presupuesto que se maneja en el caso de obtener el triunfo.
Hasta mañana
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