Dice la sabiduría bíblica que quien siembra cosecha y en abundancia, vaya si lo está probando Antonio Martínez Torres, quien como Secretario General de Gobierno ahora que dejo el cargo, está recibiendo -¿cobrando- de los engendros que no solo creo, sino que alimento en su estancia en la segunda posición de poder en Tamaulipas.
Dicen los que saben que en la política como en la vida no hay casualidades, y menos ahora que se viven los momentos más álgidos de la contienda electoral 2010, en donde uno de los grandes derrotados, además de la maestra Magdalena Peraza, es precisamente Toño Martínez Torres, a quien, los que lo quieren, lo aman, le ponen casa, y le deben hasta su sustento diario, no solo lo veían reverdeciendo laureles como Diputado local por la vía de mayoría relativa sino incluso lo tenían sentado en la posición número uno del Poder legislativo, como Presidente de la Junta de Coordinación Política en el Congreso del estado.
Pero nada de nada, y aplicando otro dicho, “que del plato a la boca se cae la sopa” cuando el llamado “chiquillo cariñoso” pensaba que su histórico berrinche priista de hace más de 10 años, mismo que lo llevo a brazos del PRD había quedado en el olvido, salió a flote, recibiendo un inesperado “dice mi mamá que siempre no”.
Lo que llevó a que uno de los hombres más cercanos a los afectos del Gobernador del estado, Oscar Almaraz Smer, de probada lealtad, capacidad y operatividad política, a que fuera el elegido para Diputación local por el XIV distrito electoral.
Tal suceso ya es historia, sin embargo las reacciones de Toño Martínez y sus engendros siguen dando de qué hablar; pues no conforme con mandarle al presunto autor de su descalabro público, Ricardo Gamundi Rosas, a uno de sus becarios como lo es el Dirigente de los tortilleros, Enrique Yáñez , con crucifico, palo hediondo y rosario al Congreso del estado, para exorcizarlo acusándolo de satánico, brujo y epítetos similares, ahora, se mueve otros de sus merolicos, al tristemente célebre, Ausencio Eng Miranda quien lo acusa de negro, jarocho y sinvergüenza.
Ambos y los que se acumulen, pueden obrar por cuenta propia, resentidos porque con la salida de Toño Martínez, se les acabo su suministro de prebendas en la Secretaría General o bien que el “chiquillo cariñoso” les ha puesto a prueba la jurada lealtad que cada quincena personajes de este tipo le refrendaban.
Y Gamundi no suelta prenda de las pluris
Aunque casi es un hecho que Antonio Martínez Torres ya casi tiene en la bolsa una Diputación plurinominal, su declarado enemigo intimo y centro de sus dardos mediáticos, Ricardo Gamundi Rosas no suelta prenda diciendo:
“La realidad se va a ver, va a salir hasta el día del registro, como paso con Oscar Almaraz, en donde los sectores se pronunciaron por él, igual va a pasar con las posiciones plurinominales, el partido va a registrar una lista, así que se deben de esperar a ver quienes vienen en la lista, así de sencillo es esto, las circunstancias del distrito, los nombres del distrito tienen mucho que ver y punto, tiene que ver mucho el análisis cualitativo y el análisis cuantitativo.
¿O lo que es lo mismo, en política del plato a la boca se cae la sopa?
-Son apreciaciones personales, en estos momentos estamos enfocados a los análisis cuantitativos y cualitativos, correlación de fuerzas, análisis de las circunstancias políticas, todo esto es lo que esta prevaleciendo en el PRI en estos momentos”
En fin…veremos y diremos
