– Obispo ora por los que cayeron en el narcotráfico.
Gastón Monge/EnLíneaDIRECTA
Nuevo Laredo, Tamaulipas.- Con un llamado a la esperanza hacia los jóvenes que han caído en la tentación del narcotráfico y de la violencia, el obispo de esta ciudad, Gustavo Rodríguez Vega, encabezo una marcha por la paz, en la que participaron más de 500 juveniles diocesanos.
De manera simultánea se realizo en los municipios de Nuevo Laredo, Matamoros y Reynosa, ciudades en donde la violencia se ha recrudecido en las ultimas semanas.
La marcha representó a la procesión del Domingo de Ramos, inicio a las 10 de la mañana en la plaza Esteban Baca Calderón, “y es una procesión para recordar la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén”, dijo momentos antes de iniciar.
Pero dijo que es también una marcha de oración por los jóvenes que han caído en las redes del narcotráfico, “y es para que se conviertan al señor y para recuperar sus vidas. Para que su juventud sea reorientada”, expreso.
En ese lugar ofreció una pequeña homilía para los jóvenes a favor de la paz, y fue acompañado por jóvenes seminaristas y sacerdotes, pero destaco que es algo propio de la Diócesis de Nuevo Laredo, y que es algo propio del pueblo de México.
“Yo creo que en todo México estamos orando por la paz, pero especialmente Nuevo León y Tamaulipas estamos más sensibles a ese tema (de la violencia)”, expreso.
La procesión avanzo por la avenida Guerrero bajo frio inusual para la temporada, entre cantos religiosos acompañados por dos grupos musicales, por espacio de dos kilómetros, hasta llegar a la catedral, en donde se reunieron con otros cientos de feligreses que esperaban el arribo de los marchantes.
Allí, el jerarca católico ofició la misa del Domingo de Ramos, y sus alrededores se convirtieron en una romería católica, con la venta de las tradicionales palmas e imágenes santas elaboradas con paja.
