Alberto Nájar
Ciudad de México
Bbc.co
La fiscalía del estado de Quintana Roo recientemente acusó a una funcionaria de la legislatura local de haber entregado unos US$35.000 a una persona que le prometió, a través de visiones extrasensoriales, que le ayudaría a multiplicar el dinero.
El caso no tendría nada de particular, si no fuera porque la empleada pública supuestamente utilizó fondos de la legislatura para efectuar el pago.
Ahora los dos están envueltos en un lío judicial, porque la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) investiga una denuncia por estafa.
No se sabe cómo esto podría afectar a la funcionaria. Las identidades de las personas involucradas no han sido reveladas a BBC Mundo, pero la fiscalía sostiene que la denuncia podría terminar en cárcel para el presunto vidente.
El caso pasó desapercibido en México, donde la brujería, visiones y el esoterismo caminan de la mano con la política y el quehacer público, afirma el periodista José Gil, autor del libro “Los Brujos del Poder”, que da cuenta del uso de hechizos y conjuros por parte de presidentes y gobernadores mexicanos.
“Es una constante. La política y la brujería son muy cercanos, sobre todo en momentos de crisis” dice Gil en conversación con BBC Mundo.
El uso de chamanes y brujos es una actividad en alza, añade Gil, especialmente este año que habrá elecciones en diez estados de México.
El deber de la magia
Poder. Es la razón principal de algunos políticos de México –y de otros países- para recurrir a la brujería.
“Necesitan confianza para ganar elecciones y gobernar. Otros que buscan mantenerse, y algunos más lo que pretenden es aumentar el poder que ya tienen”, explica Gil.
Pero no es todo, porque los políticos también utilizan la magia para defenderse o atacar adversarios, le dice a BBC Mundo Antonio Vázquez, el llamado Brujo Mayor de México.
“Estamos en el equipo de muchos candidatos. Les quitamos las malas vibraciones que les ponen para hacer daño o bloquear su carrera”, explica.
Y no es cuestión de ideología, afirma Vázquez, porque brujos, chamanes y espiritistas trabajan con candidatos de izquierda, derecha o los que se dicen independientes.
“Las personas de magia tenemos un intenso deber: que llegue al gobierno la persona que más ayude al pueblo”, asegura el Brujo Mayor.
Espíritus gobernantes
Hace mucho tiempo que la magia y los espíritus acompañan la vida política de México.
Algunos historiadores han documentado que el presidente Francisco Madero, quien encabezó el movimiento de la Revolución en 1910, era un ferviente devoto del espiritismo.
Madero creía que su trabajo político fue dictado por un espíritu, al que identificaba con las letras “BJ”, señala José Gil en su libro.
Varios de sus sucesores mantuvieron esta creencia, incluso Plutarco Elías Calles, quien gobernó al país entre 1924 y 1928.
Públicamente el presidente decía no tener creencias religiosas, pero según Gil en los últimos años de su vida participó en sesiones del Instituto Mexicano de Investigación Psíquica.
Calles fue un radical anticatólico. Durante su gobierno ocurrió la Guerra Cristera, un movimiento armado que causó la muerte a miles de personas.
Charlatanes
La creencia en magia y protección espiritual es una práctica vigente.
En los últimos años, todos los presidentes de México aceptaron que chamanes les hicieran una “limpia”, es decir, un rito para alejar las malas vibraciones y protegerlos de posibles hechizos.
Es parte de la cultura del país, dice José Gil. “En 2005 una encuesta oficial reveló que los mexicanos creen más en la fe que en la ciencia para curar enfermedades”.
Pero los conjuros no siempre funcionan, sobre todo si los practica algún charlatán “que también los hay” entre los brujos, reconoce Antonio Vázquez.
En 2000, por ejemplo, muchos pronosticaron que el PRI se mantendría en el poder, pero en la elección de ese año el ganador fue el opositor Vicente Fox.
Algo parecido ocurrió en Quintana Roo. El fiscal del estado, Francisco Alor, le dice a BBC Mundo que el presunto vidente ofreció devolver en varios pagos el dinero que le fue entregado.
“Pero la Procuraduría va a actuar, independientemente del arreglo entre particulares”.
