Hugo Reyna/EnLíneaDIRECTA
Reynosa, Tamaulipas.-Endeble su militancia dentro del Partido Acción Nacional como débil también su decisión de colaborar en la campaña de la formula de candidatos de su partido. Raúl García Vivian no consiguió el cisma esperado con la confirmación de algo que desde hacía semanas- pese a ser catalogado de rumor- era un hecho: su renuncia a la candidatura a la diputación local que se le ofreció cuando fue vencido por Jesús María Moreno Ibarra.
Desde aquella designación a cargo del CEN del PAN a mediados de Marzo, García Vivian acostumbrado a presionar para obtener su voluntad e intereses, mantuvo un bajo perfil, jamás emitió declaraciones a favor de “Chuma” y algo falto de civilidad política no le alzó el brazo en señal de acato al fallo de su partido, por el contrario alentó y avivó un fuego que hoy lo consumió totalmente.
El 23 de Abril en un encuentro con “Chuma” Moreno Ibarra y los candidatos a las diputaciones: Hugo Ramírez Treviño, Héctor Pérez Ibarra, Roberto Carlos Rodríguez Romero y José Ramón Gómez Leal, Raúl García Vivian reafirmaba su militancia y ascendencia dentro del PAN, al que esto escribe le rechazó cualquier negociación con el PRD.
Aunque aceptó que sí tuvo encuentros con Julio Almanza Armas, candidato del PRD a la gubernatura, y escuchar una invitación a participar como candidato por ese partido, sabedor García Vivian de incurrir en una grave falta a los estatutos de su partido por el simple hecho de reunirse con alguien ajeno al PAN para dicho propósito.
En aquel encuentro que parecía de cordialidad y amista y en apariencia de diferencias zanjeadas, Raúl García le declaró lealtad y apoyo a “Chuma” Moreno Ibarra y nunca reveló o confió problemas de comunicación o falta de coordinación como fueron los argumentos de su carta renuncia.
Apenas separan 17 días de aquella reunión en el Café “Rey”, pero Raúl García que aparentaba alegría y satisfacción en aquel entonces, se desilusionó rápido y sin credibilidad alguna de sus argumentos de renuncia, achaca sus problemas al comité de campaña de “Chuma”, cuando apenas días antes había ofrecido trabajar con todo esfuerzo por el, en menos de tres semanas sus sentimientos cambiaron y renunció, al menos eso explica en su carta.