– Dice titular de la Seapa.
Gastón Monge/EnLíneaDIRECTA
Nuevo Laredo, Tamaulipas.- El titular del Sistema de Agua Potable y Alcantarilla de Tamaulipas (Seapa), Sabas Campos, considero que Nuevo Laredo es uno de los municipios que mejor ha aprovechado la inversión en materia de saneamiento de aguas residuales, y dijo que en todo el estado se espera llegar a un 80% en el tratamiento de ese tipo de aguas que retornan al rio Bravo más limpias.
“Esto quiere decir que de cada cien litros de aguas negras, 80 estarán tratadas y saneadas. Pero si tomamos en cuenta que en poco más de cinco año, tendíamos un 25% de aguas tratadas, llegar al 80% es un logro muy importante en este sexenio de Eugenio Hernández Flores”, destaco.
Con esos resultados, menciono que Nuevo Laredo es una de las cuatro ciudades de Tamaulipas que tratan en su totalidad las aguas residuales; los otros tres municipios son Miguel Alemán, Llera y Victoria.
Comento que en el área conurbada de Tampico/Madero/Altamira, se eta haciendo una inversión de casi 700 millones de pesos, que utilizan en la construcción de las plantas tratadoras de aguas residuales que permitirán sanear las aguas de esa región del sur de la entidad.
Al tocar el asunto de los desfogues de agua de la presa La Amistad, ubicada en Acuña, Coahuila, dijo el funcionario estatal que esta ciudad tiene un riesgo de la cantidad de agua que llegue, aunque menciono que debido a ello el estado no tendrá problemas de abasto de agua en este año.
“Nuestros distritos de riesgo tienen el año asegurada por dos años más, y las ciudades con agua para el consumo humano, también está asegurada, además de que se está pagando el agua que se le debía a Estados Unidos”, expreso.
Esa presa cuenta con un 75% de agua en su cuenca, mientras que la presa Falcón, ubicada en el municipio de Guerrero, está al 90% de su capacidad, lo que de acuerdo al funcionario, garantiza el abasto para toda la población durante los próximos 24 meses.
A ello se suma la lluvia que afecta al norte de los estados de Chihuahua, Durango, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, cuyos afluentes desembocan en el rio Bravo.