– Expreso la regidora coordinadora de la comisión de educación en el ayuntamiento porteño, Rosa María de la Serna Martínez
Liliana Rivera Grimaldo/EnLíneaDIRECTA
Tampico, Tamaulipas.-El problema de inseguridad es real y las balaceras a diferentes horas del día y en diversos puntos de la ciudad están ocurriendo, por ello es necesario capacitar y proteger a los alumnos, maestros, directores y padres de familia para que sepan como responder ante una contingencia de este tipo, que desafortunadamente insistió se están presentando expreso la regidora coordinadora de la comisión de educación en el ayuntamiento de Tampico, Rosa María de la Serna Martínez.
Recordó que hace algunos meses, hubo instituciones educativas que recibieron cursos por parte de personal de protección civil quienes capacitaban y orientaban respecto a como actuar en caso de cualquier contingencia incluyendo balaceras, por lo que considero que deben retomar dicha preparación
“Corresponde a los maestros que ya se capacitaron en ello, seguir retomando y practicando medidas de emergencia, en algunas escuelas ya se puede practicar incluso con rutas de evacuación, señalamientos, enseñar a los de primer grado para incorporarlos a programas, pero si es importante porque estamos viviendo ahorita una situación un poquito complicada y sí nos preocupa mucho los alumnos, nadie estamos familiarizados con esto y en un momento ni uno como adulto sabe que hacer y que medidas tomar, entonces si ir un poquito incorporándonos un poquito a lo que vivimos ahorita en día y enseñar a los niños que hacer en un momento determinado, pero sobre todo no perder la calma y pensar en lo que hay que hacer”.
De igual forma comento que en lo que respecta a la venta de comida de chatarra en las escuelas, que por lo menos en este ciclo escolar no se pudo frenar y se dejo a criterio de los directivos, considero que es un asunto que compete tanto a padres de familia, alumnos como maestros a impulsar una alimentación sana, ya que reiteró que en nada ayuda que por un lado se frene la venta en las cooperativas escolares si a la salida, los propios padres les compran a sus hijos dulces.
Considero que para el 2011, esta medida de evitar la comercialización de alimentos con altas cantidades de calorías en las escuelas pudiera establecerse como obligatoria, aunque advirtió que será necesario supervisar de manera periódica que cada una de las instituciones cumpla.
