

– El padre dejo encendido el motor y menor acciona las velocidades y acelera, impactándose en palmera provocando el percance, el saldo tres niños lesionados y daños materiales cuantiosos.
Antonio Cárdenas /EnLíneaDIRECTA
Matamoros, Tamaulipas.- La irresponsabilidad de un padre de familia, a punto estuvo de costarle la vida a sus tres menores hijos entre los 8, 5, 1 año de edad, al dejar encendido el motor de su camioneta en el garaje de su domicilio en la colonia Abelardo de la Torre, provocando una impresionante volcadura cuando el menor de 8 años puso en marcha la unidad motriz.
Los hechos se registraron a las 8:30 horas de este día cuando el señor Alfredo Colín Padilla de 25 años con domicilio en calle Jesús Urquiza esquina Lauro Rangel de la colonia Abelardo de la Torre, se disponía a realizar sus actividades cotidianas y según su dicho encendió el motor de su camioneta Ford Winstar modelo 1999 de color Azul y subió a sus tres hijos, colocando en el porta bebé al niño de un año y se metió a su casa por unos papeles, mientras su esposa se arreglaba.
Fue el menor Ricardo de 8 años quien acciono la palanca de velocidades y acelero al máximo recorriendo la camioneta unos 80 metros hasta impactarse en una palmera y provocando la volcadura quedando los menores atrapados en el interior.
Guardias del Cbtis 135 y personas que pasaban en esos instantes en el lugar corrieron a auxiliar a los menores, mientras los padres aun no se percataban de lo ocurrido ya que se encontraban en el interior de la casa.
Los menores fueron puestos a salvo y de inmediato una ambulancia de la cruz roja los trasladó en demanda de atención médica quedando en observación en la sala de pediatría del hospital general, aunque el reporte médico señalaba que los tres niños se encontraban estables, pero con golpes en su cuerpo.
Al lugar hicieron acto de presencia peritos de transito local quienes harán efectivo las sanciones que marca la ley al irresponsable padre de los niños que por su imprudencia a punto estuvo de terminar en tragedia.
La camioneta fue remolcada por la grúa de transito local y depositada en el corralón municipal, aunque quedo destruida por la aparatosa volcadura.