Maremágnum/Mario Vargas Suárez *La Fotografía

0

Siempre he pensado que la fotografía es el arte de detener, de congelar el tiempo con todos sus matices, brillantez u opacidad, profundidad o superficialidad y quienes logran esa magia pareciera que inmortalizan un rostro, un gesto, un paisaje… la vida, la muerte, el mismo nacimiento.
En Tamaulipas tenemos extraordinarios tomadores de imágenes que muchas veces no logran vivir de ello, porque todo mundo nos consideramos “expertos en fotografía” pero los que saben aseguran que pudiera ser un arte y hasta una ciencia porque debes saber y el conocimiento lo da la práctica.
Carlos Santamaría Ochoa es uno de esos fotógrafos que arrancado de la capital del país llega a la capital de Tamaulipas para hacer periodismo impreso, pero su ángel es la fotografía.
Santamaría ha montado exposiciones de su arte-ciencia en diversos escenarios, incluyendo los de la madre patria a quien le ha inmortalizado escenas realmente sublimes porque le gusta “congelar” paisajes principalmente.
Desconozco si Carlos Santamaría participa con sus trabajos en concursos de fotografía, pero estoy seguro que con un excelente asesoramiento, pondría muy en alto el nombre de Tamaulipas y de México, como esta vez logró Daniel Aguilar, poblano y que se incorpora al periodismo noticioso en el año de 1989.
Este 2011 Daniel Aguilar ganó el premio Rey de España en la categoría de fotografía por la imagen que logró durante el sismo en Haití en enero del año pasado, cuando la isla fue azotada con resultados catastróficos.
La imagen que premia al poblano Aguilar, forma parte de la serie “Las venas abiertas de Puerto Príncipe” que fue publicada en la revista mexicana “Emeequis” y se trata de dos niños uno cargando en hombros a otro más pequeño y como fondo un edificio en ruinas y ardiendo.
Los colores del fuego que pareciera bailar al consumir las paredes ennegrecidas por el humo, el miedo angustioso de ojos infantiles que dos pequeños descalzos y que el mayor carga con cariño y sobreprotección forman la imagen que Daniel Aguilar inmortaliza y deja en la portada del libro “Haití, isla pánico”.
El poblano fotógrafo asegura de esta experiencia que lo más difícil de ésos días fue enfrentar el impacto emocional en esa cobertura del sismo en Haití y el tomar las fotografía de la isla en ruinas fue un reto porque “no sabías si dejar la cámara o ayudar a la gente que gritaba de dolor al ver al país en ruinas.
Indagando en la web obtengo el dato que los Premios Internacionales de Periodismo “Rey de España” constan de la entrega de 39 mil euros, algo así como 660 mil pesos y serán recibidos por Daniel Aguilar en la primavera próxima.
La practica de la fotografía, dice Carlos Santamaría Ochoa, es un “…detener el tiempo, es un congelar la imagen de lo que tu quieras inmortalizar…” porque la fotografía perdura más allá de la vida y la buena fotografía te inspira.
La fotografía en el periodismo es una herramienta extraordinaria ya que puede plasmar la misma noticia en una sola imagen.
La fotografía periodística es más impactante que toda una narrativa porque no miente, denuncia en su entrega toda la dimensión que quiera ver quien la observa.
En la vida cotidiana la fotografía es practicada hasta por niños y muchas de ellas las valoramos al tiempo, porque ellas son los espejos que reflejan la evolución del hombre, de la ciudad, de la misma naturaleza y “…nos maravillamos de lo que una imagen encerrada en la foto, puede evocar” como afirma Carlitos.
Comentarios: [email protected]

(Visited 1 times, 1 visits today)