– Construirán un parque en zona de inundación.
Gastón Monge/EnLíneaDIRECTA
Nuevo Laredo, Tamaulipas.- A pesar de vivir desde hace más de 15 años en una zona de inundación por su cercanía con el río Bravo, 33 familias de la colonia irregular El Remolino se niegan a la reubicación que les ofrece el ayuntamiento, por lo que se pudieran tomar otras medidas, ya que en ese lugar será construido un parque con áreas verdes.
De acuerdo a Carlos Cantú rosas, titular del Instituto Municipal de la Vivienda y Suelo Urbano (IMVISU), de las 101 familias que originalmente vivían en esa colonia, 68 aceptaron su reubicación y ya viven en el fraccionamiento El progreso.
“Hay algunas personas que están renuentes a ser reubicadas, por lo que el departamento jurídico de la presidencia municipal, tomarán cartas en el asunto para determinar qué medida adoptar, pero se le dirá a esas personas que es por su bien la reubicación, y que se les darán casas en mejores condiciones”, explicó el funcionario.
Agregó que la idea de la reubicación es mejorar la calidad de vida de esas familias al no ponerlas en riesgo en cada crecida de la corriente del río Bravo.
Mencionó no ser la persona indicada para determinar que se puede hacer con las familias que aún se niegan a la reubicación, ya que será el departamento jurídico, “pero de alguna manera se les tendrá que seguir invitando a que desalojen sus viviendas por estar en una zona de alto riesgo”, expresó.
Agregó que luego de que sean demolidas las viviendas, por ningún motivo se permitirá que haya alguna construcción fija, ni que alguien cuente con propiedades, ya que será un parque que la secretaría de obras públicas construirá en ese lugar, aunque no se menciona tampoco una fecha precisa mientras no se haya ido el último de los habitantes de El Remolino.
Este asuntó fue ventilado la mañana de ayer en la sala de juntas del edifico anexo a la presidencia municipal en donde estuvieron presentes directivos y titulares de diferentes departamentos relacionados con la obra pública, la protección civil y la vivienda.
Fue a puerta cerrada a los medios de comunicación, pero Cantúrosas adelantó que se trataría la manera de convencer a esas 33 familias que aún viven en El Remolino, a que acepten la reubicación para iniciar con el proceso de demolición y construcción del parque.
El Remolino ha sufrido en varias ocasiones la inundación total de las viviendas, debido a las constantes crecientes del agua del río Bravo, por lo que las pertenencias han sido dañadas en su totalidad, pero aún así, se niegan a abandonar ya que han vivido en ese lugar por más de 15 años.
