–Dicen que el gobierno falló en sus estrategias de lucha
Gastón Monge/EnLíneaDIRECTA
Nuevo Laredo, Tamaulipas.-Obispos de la provincia de Monterrey, que integra las diócesis de Tamaulipas, de Nuevo León y del norte de Coahuila, señalaron que el gobierno federal equivoca sus estrategias de lucha contra el narcotráfico, por lo que trabajan en la evangelización para frenar el avance de la inseguridad y de la violencia.
Los religiosos se reunieron para analizar la organización de las diócesis que conforman esta provincia, y después ofrecieron una conferencia de prensa a los medios de comunicación.
Fue el cardenal de la arquidiócesis de Monterrey, Francisco Robles Ortega, quien mencionó que bajo la amenaza del narcotráfico, los sacerdotes de Nuevo León no han dejado de trabajar en la evangelización, incluso en las parroquias más amenazadas por la violencia.
Mencionó que los religiosos participan en todas las actividades en las que deben participar dentro de los mandamientos de la Iglesia Católica, “y creo que es un aporte muy importante para la comunidad, ya que debido a la inseguridad, la población tiene un sentimiento de desamparo y de desesperanza”, expresó.
Dijo que si desde la perspectiva de la Iglesia católica ha fallado el gobierno federal, debe ser el mismo gobierno el que amplíe las oportunidades en coordinación con los empresarios, para crear fuentes de trabajo digno.
Gobierno equivoca estrategia contra el narco
Al referirse a la estrategia del gobierno en su lucha contra el narcotráfico, dijo compartir esa percepción al decir que es una equivocación enfrentar ese problema como lo está haciendo el presidente Felipe Calderón, “y es necesario tocarles el tema económico al crimen organizado y ser más estricto en el paso de las armas al país”, indicó.
Dijo que esa lucha equivocada ha crispado los ánimos de la sociedad y ha provocado ‘muchísimas muertes’, incluso de inocentes y de muertes que se cuentan pero que no se investigan bajo el esquema legal, por lo que reiteró que la estrategia falla cuando se confronta de la manera como lo hace el gobierno, al rimen organizado.
Al preguntarle al jerarca católico si integrantes del crimen organizado se han acercado a ellos para pedir perdón, mencionó que no puede dar testimonio de cuántos lo han hecho, aunque dejó entrever que sí se han acercado a ellos en confesión, confesar sus pecados y cambiar de vida.
“Es difícil tener este dato, pero no se identifican porque la Iglesia está abierta a todos, y no se puede cuantificar este dato, pero la Iglesia tiene en su seno a gente muy mala y a gente que lucha por ser mejor, porque la Iglesia es parta todos”, expresó.
Crimen recluta a los jóvenes
Antonio González Sánchez, obispo de Tampico, Tamaulipas, mencionó que en la entidad el crimen organizado está reclutando a muchos jóvenes que se dejan seducir, por lo que la Diócesis que representa trabaja arduamente con la juventud para el reforzamiento de los valores.
“¿Quién ha fallado?”, cuestionó el obispo, al decir que las instituciones gubernamentales y no gubernamentales han fallado, así como las instituciones y sobre todo, la educación.
A su juicio, dijo que ante la escases de oportunidades de trabajo y de educación para los jóvenes, el fenómeno de la inseguridad y de la violencia se presentan con mayor gravedad, “pero la corrupción es alarmante porque ha penetrado en muchas instituciones importantes para la sociedad”, expresó.
Sin embargo, señaló que la sociedad también ha fallado porque ha descargado todo en el gobierno, pero que se debe a su apatía y a su poca participación en la presentación de propuestas y soluciones a ese problema.
El obispo de Linares, Ramón Calderón Batres, mencionó que pese a que existe diálogo con las autoridades, no se les ha solicitado su apoyo ni consigna.
Al terminar la conferencia, los obispos que participaron, Jorge Alberto Cavazos Arizpe, obispo auxiliar de Monterrey; Gustavo Rodríguez Vega, de Nuevo Laredo; Antonio González Sánchez, de ciudad Victoria, y José Luis Dibildox, de Tampico, además de los mencionados, se retiraron para preparar una misa que sería ofrecida más tarde en la Catedral del Espíritu Santo.