-Casa del Migrante atiende a tres mil 700 mexicanos este año–
Gastón Monge/EnLíneaDIRECTA
Nuevo Laredo, Tamaulipas.- El año pasado más de 70 mil mexicanos fueron deportados de Estados Unidos por no contar con documentos, cifra que podría igualarse este año debido al incremento en las detenciones de mexicanos en ese país, señaló el sacerdote católico y director de la Casa del Migrante, Gianantonio Baggio.
Dijo el religioso que tan solo en la Casa del Migrante han brindado atención, orientación y apoyo a tres mil 700 deportados hasta el momento, los que son más de la mitad de los refugiados; el resto son centroamericanos.
Francisco Zavaleta, de 29 años y originario de Cuernavaca, Morelos, fue deportado de Miami, Florida, la semana pasada, debido a un infracción de tránsito, y es uno de los miles de mexicanos indocumentados que son deportados por esta frontera.
Dijo que vivió en Estados Unidos 12 años, tiempo en el que trabajó en diferentes oficios, ya que solo estudió hasta el segundo grado de primaria.
“Estuve trabajando en las fábricas, pero actualmente ya era muy difícil porque no quieren saber nada de los mexicanos, porque la situación está muy difícil”, explicó.
Mencionó que este año la policía detienen a los mexicanos que le parecen ‘sospechosos’, para saber si cuentan con documentos, pero señaló que es un pretexto para deportarlo.
“La situación ya está más caliente para los mexicanos, porque hay muchos policías en las calles que tienen indicaciones de detenernos y deportarnos”, refirió.
Francisco intentará cruzar una vez más el río Bravo, porque dijo no conocer a nadie en su tierra natal, ya que su familia se encuentra en Estados Unidos, y esa es la razón por la que está decidido a cruzar la frontera, a pesar de los riesgos.
Xiomara Rol, es de Honduras, y al igual que Francisco, salió de su país para buscar un mejor futuro para su familia, pero emigró al lado de su esposo, a pesar de haber dejado en su país a sus tres hijos.
Ella espera cruzar la frontera en cualquier momento, y no piensa retornar a su país debido a que la crisis económica mantiene altas tasas de desempleo”, y desde que fue el golpe de estado, la situación se ha visto más difícil”, mencionó.
En mayo de este año Salió de Honduras, y luego de cuatro días de travesía, cruzó el río Suchiate que divide México con Guatemala, pero debido a las dificultades, tardó cuatro meses en llegar a esta ciudad.
No tuvo contratiempos ni sufrió abuso de autoridades o de delincuentes, aunque de acuerdo al sacerdote Baggio, los abusos, las extorsiones y los secuestros son constantes, pero declinó hablar sobre el asunto, “porque es muy peligroso debido a que ya recibimos amenazas el año pasado”, explicó.