– Alejandra Sota, vocera del Gobierno Federal se niega a declarar públicamente que fue lo que sucedió en esta ciudad.
Oscar Mérida Barrios/EnLíneaDIRECTA
Matamoros, Tamaulipas.- A más de 24 horas, en que un convoy de elementos del Ejercito de los Estados Unidos de Norteamérica ingresara a territorio nacional vía puente Viejo Internacional (Gatteway) de este puerto fronterizo, la PGR y la vocera del Gobierno Federal Alejandra Sota, han callado.
De manera extraoficial se sigue manejando la teoría de que un convoy de elementos de la Secretaria de la Defensa Nacional (SEDENA) realizó un importante despliegue de elementos y unidades en punto de las 09:30 horas, en el citado cruce internacional para esperar y custodiar a un convoy de vehículos blindados procedentes de los Estados Unidos y en su interior Fuerzas Militares gringas de alto nivel de inteligencia.
Se supone que el convoy de unidades militares de los Estados Unidos fue guiado hasta el Regimiento de Caballería Motorizada de la Sedena con sede en el Libramiento Emilio Portes Gil entre la brecha 30 que conduce al ejido la Venada y la carretera Sendero Nacional.
Ahí se cree que altos mandos de las fuerzas militares gringas sostuvieron un intercambio de información con altos mandos de la Secretaria de la Defensa Nacional donde los temas a tratar permanecen hasta el momento como reservados debido a que la Procuraduría General de la República y el Gobierno Federal han blindado todo.
Se supone que para que autoridades de otros países para que ingresen a territorio nacional deben ser de acuerdo a una especie de convenio de colaboración entre ambas sedes diplomáticas (lo cual queremos suponer).
En información publicada en los sitios de la red internacional se escribe que de manera no oficial el Gobierno de Felipe Calderón obtuvo información que algunos grupos delictivos infiltrados en el Estado Mayor Presidencial (EMP), estaban planeando un ataque pero que afortunadamente fueron descubiertos a tiempo, estas personas desleales al Estado Mayor Presidencial quienes operaban para golpear desde dentro a la cúpula del Gobierno de Calderón.