Nuevo Laredo, Tamaulipas.- A pesar del intenso calor que invade la región, la Secretaría de Salud en la ciudad reportó el ingreso a hospital de tres menores de cinco años con evidentes síntomas de deshidratación, cifra que fue considerada por Gregorio Ortegón, coordinador médico de la jurisdicción sanitaria, como mínima con relación a años anteriores.
“En otras temporadas de calor a estas alturas del año ya teníamos números más altos de niños internados en hospital a consecuencia de alguna deshidratación o gastroenteritis”, expresó el médico.
Destacó que la dependencia trabaja de manera intensa en la aplicación de medidas preventivas a la población, así como para brindar información sobre lo que se debe hacer durante la temporada de calor intenso que ya inició.
“Las personas mayores de 60 años y los menores de cinco años, son los más expuestos a este tipo de enfermedades, por lo que es importante que tengan sus vacunas completas y que los adultos estén al pendiente de su alimentación y cuidado”, añadió.
Añadió que existen recomendaciones a la población de que evite al máximo consumir alimentos en la calle, y que revise bien lo que consuma incluso dentro del hogar, ya que algunos son de fácil descomposición ante el calor extremo.
“En esta temporada es común que aumenten los casos de gastroenteritis, y en algunos casos son motivo de internación en hospitales por la deshidratación”, refirió.
Dijo que la dependencia solicita diariamente un reporte a las instituciones de salud en la ciudad, para saber el estado de salud de las personas, por lo que reiteró que solo tres niños fueron internados y ni un solo adulto.
Como medida preventiva añadió que desde febrero, cuando inició la Primera Semana Nacional de Salud, se repartieron entre la población, más de 30 mil sobres de suero Vida Oral, y mencionó que llegaron más sobres para repartir en lo que resta de la Segunda Semana Nacional de Vacunación.
Recomendó a las escuelas que sus cooperativas tengan cuidado en la preparación de los alimentos que vendan a los estudiantes, y que se abstengan los maestros a exponer a sus alumnos a actividades físicas al aire libre, y utilizar bloqueadores solares y usar ropa clara y algo que proteja la cabeza de los rayos solares.
