Y aunque usted no lo crea… ayer, sí, ayer ¡fui a desfilar!, ¡ah, verdad!, pero como siempre y a mi manera… ¡en contra! del flujo del desfile, ya que no iba en ninguno de los contingentes que participaron…
Sí, la ¡juventud! Matamorense desfiló, y donde las mujeres… se distinguieron por su belleza, y por su alegría a la hora de desfilar por el centro de Matamoros, sí, ¡hermosas! Todas… y desfilaron uniformadas, otras vestidas con la tradición mexicana… otras, luciendo sus mejores galas, sí… ¡hermosas todas ellas!
Mientras que los hombres… ¡gallardos! y orgullosos al desfilar… la mirada al frente, erectos, sí, derechitos a la hora de participar… y donde los uniformes, sobretodo los de las escoltas y las bandas de guerra… mostrando el orgullo de ser mexicanos.
Un servidor, en tenis, camiseta, y shorts… ¿corriendo?, bueno, poquito, más que todo ¡caminando!, para disfrutar el ver el ¡orgullo! de nuestra juventud… y hasta la plaza principal fui, para constatar el… ¿cuánta gente? disfrutaba del desfile, y vi padres y madres de familia… tomando fotografías a los hijos que participaban, vi madres jóvenes vestidas también tradicionalmente y llevando de la mano a sus pequeños hijos… inculcando ya en nuestra niñez… el en el futuro participar, en el día que honramos a los héroes que nos dieron ¡patria y libertad!
También vi… lo que se llamaría poca concurrencia… y no sólo entre los espectadores, sino también en el balcón de la PresidenciaMunicipal… ¿desangelado el desfile?, y no importando lo anterior… la juventud, los jóvenes que participaron, llenaron de orgullo a un servidor, que en mistiempos mozos… ¡hace 50 años!, claro que desfile.
La diferencia de aquellos años… que casi al final del desfile, participaron… los ¡caballos de hierro!, sí, las motocicletas, y los ¡caballos mustang!, y donde tanto los de hierro como los mustang, se reúnen en el Olímpico… y mis respetos al participar.
Al final, y como tradicionalmente se da… ¡los caballos de carne y hueso!, y los ¡charros! mexicanos… sí, si fui al ¡desfile! del 16 de septiembre, y también vi con orgullo a los maestros dirigir sus contingentes… garbos los maestros, y ¡hermosas! las maestras… maestros y maestras que educan a nuestra juventud, ¡mis respetos señores y señoras!
Y déjeme darle un consejo a las autoridades municipales… en el siguiente desfile, pongan a ¡marchar!, a ¡desfilar!, a los tránsitos y a la policía municipal… que falta les hace a aquellos que enseñan… tremenda ¡panza!, por el mucho comer, y poco ejercitar el ¡cuerpezote!
Ahora, si usted no asistió… ¡se lo perdió!, y que sirva esta para que en el siguiente desfile, y que si la memoria no me falla será el 20 de noviembre… usted haga acto de presencia y pueda llenarse de ¡orgullo! al ver a la juventud… ¡desfilar!
Y déjeme decirle el ¿por qué? no fui a celebrar el ¡Grito de Independencia!, y la razón, sencilla… estaba en “brazos de Morfeo”, sí, estaba ¡dormido!, cansado de la semana, y tratando de tener fuerzas para enfrentar la semana que inicia hoy… pero desde temprano, al terminar el programa de radio, lo terminé con un fuerte… ¡viva México!
Sí, ¡viva México!, y vivan por siempre los héroes que nos dieron ¡patria y libertad!, que nunca, que jamás se nos olviden… ya que el futuro se basa en la historia, y la historia escrita ya fue… y sólo falta enfrentar el futuro que le heredaremos a la juventud que ayer desfiló…
Y donde el futuro será marcado… por el ¿cómo? atendemos los problemas que más asedian a nuestra juventud… y son problemas que le fueron ¡gritados! a Felipe Calderón en el zócalo capitalino el sábado por la noche… “fraude-fraude-fraude”, “a-se-si-no-a-se-si-no”, y el primer ¡grito!, en referencia al proceso electoral recién finiquitado, y también al ¡fraude! que nos quiere imponer con su “reforma laboral”.
Mientras que el segundo grito… por la ¡inseguridad! que sigue imperando en nuestro país… y fueron ¡gritos! que aunque no quiera Felipe Calderón aceptar… muestran el funesto legado que deja a los mexicanos en la penumbra, en el crepúsculo… de su mandato presidencial.
Y donde a Felipe no le quedará más que… ¡desfilar! fuera de nuestro país, y tanto ¿si pasa? su reforma laboral, como si es ¡rechazada!, y no importando que tanto el PAN, como el PRI, y el ¿nuevo? PRD… ya se alinean para “empujar” lo que la iniciativa privada, pero que ¡privada de razón! le quiere imponer… a los trabajadores mexicanos.
Nos vemos el miércoles…
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