Reynosa, Tamaulipas.-Hay cosas que no tan fácilmente se van a olvidar del año viejo…
Nos encargamos de refrescar la memoria a todos aquellos personajes de la política, del gobierno, de las instituciones que no metieron las dos, sino las 4 patas en horario de trabajo y que afortunadamente, se estuvo ahí para contarlo.
En el quinto puesto, le vamos a compartir quien fue el único que en aquellos días del polémico 2012, probó el platillo típico de la discordia en Reynosa; el caldo de conejo que aparentemente resultó como el alimento más afamado por la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados, Alfredo Andrade Castillo; su presidente.
En el cuarto lugar fue una peculiar broma en agravio del Presidente del Club Amigos de Reynosa, Julio Martínez Zarate, durante los tradicionales festejos de la temporada, ríase usted también…
En el tercer lugar, nos percatamos de que la regidora del cabildo reynosense, San Juana Aguiñaga Rangel, tiene mayor popularidad que el mismísimo alcalde Everardo Villarreal, pues cuando este regresó a la secundaria donde estudio a dejar un paquete de obras, la priista le ganó el “parpadeon” con los futuros votantes.
En el honroso segundo lugar, tenemos al secretario de seguridad pública en Tamaulipas, Rafael Lomelí Martínez, que no tuvo paciencia ante las preguntas de los aguerridos reporteros de la fuente en esta frontera.
Y como primerísimo lugar, y por encontrarse frente a la audiencia que actualmente domina, el jefe del departamento regional de la educación, Raúl Ángel Zarate Lomas, en una entrega de becas, hizo una especie de señas beisboleras estando en el pódium, a ver si usted le entiende.
El munícipe Everardo Villarreal, estando a un lado de él se dio cuenta y no aguantó la risa.
