Cruz Azul vence en penales al Atlante y termina con una sequía de 15 años sin títulos
CANCÚN, México. Abr. 10, 2013.- Cruz Azul tuvo que llegar hasta los nervios y drama de las penas máximas para vencer al Atlante 4-2, romper con la sequía de títulos tras siete finales perdidas y consagrarse campeón del Torneo de Copa Clausura 2013.
Luego de empatar 0-0 en los 90 minutos reglamentarios, donde hubo escasas opciones y los porteros Jorge Villalpando y José de Jesús Corona fueron claves para ello, todo se debió definir desde el manchón penal, donde Corona fue decisivo al detener el primer tiro a Francisco “Kikín” Fonseca.
El colombiano Teófilo Gutiérrez, Javier “Chuletita” Orozco, Alejandro Castro y Pablo Barrera acertaron los cuatro tiros de la Máquina.
Mientras tras el acierto de Corona al tiro de “Kikín” Fonseca, Alberto Jorge y el ecuatoriano Luis Quiroz acertaron los suyos, pero Luis Venegas echó el suyo afuera a la derecha que decretó el triunfo celeste 4-2, para el cuarto torneo de Copa de los “cementeros”.
El encuentro empezó con dominio de los visitantes, pero el Atlante equilibró las acciones y así terminaron el primer tiempo, los celestes con cuatro disparos de gol, los Potros con uno menos.
Para la segunda parte, Atlante, que jugó sin el goleador chileno Esteban Paredes, con problemas físicos, fue mejor en la mitad del campo hasta que los azules comenzaron a hilvanar llegadas y estuvieron cerca del gol, sobre todo en el 68 con un par de llegadas, de Javier Orozco y Gerado Flores.
Jesús Corona, portero de Cruz Azul, salió mal en el 77 y Atlante estuvo cerca de anotar, sin embargo el abrazo sin goles siguió, gracias a una jugada salvadora de Orozco.
A dos minutos del final, Gerardo Torrado le puso un balón al colombiano Teófilo Gutiérrez y el arquero Jorge Villalpando salvó a su equipo; en el contragolpe, Jerónimo Amione disparó de manera cruzada, pero Corona intervino con una gran salida para provocar la decisión en serie de penaltis.
Cruz Azul había ganado el cetro del invierno de 1997 frente al León con un penalti decisivo de Carlos Hermosillo y desde entonces mantuvo una sequía que se extendió por siete finales en Copa Libertadores, la Liga de la Concacaf y en el torneo mexicano.
“Se lo dedicamos a los hinchas que siempre nos apoyaron”, dijo el portero Corona, quien marcó diferencia con su salida en el minuto 88 y en los penaltis, al atajar el primer disparo, de Fonseca, lo cual mantuvo a su equipo delante y al rival presionado.
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