Nuevo Laredo, Tamaulipas.-Cuatro de cada 10 personas que acuden al bufete móvil de la Barra Colegiada de Abogados, es para solicitar asesoría contra el abuso de empresas financieras y bancarias, que utilizan prácticas extrajudiciales para amedrentar a sus deudores para que paguen.
El titular de este bufete, Manuel Galván, comentó que se trata de una barbaridad la que se comete contra las personas que caen en manos de las llamadas financieras, bancos y algunas mueblerías que de manera ligera autorizan créditos a personas humildes sin constatar que en ellos sea viable la recuperación del bien comercializado.
“En el pecado llevan la penitencia estas instituciones, porque antes de otorgar un crédito deben cerciorarse de la viabilidad de la recuperación, por lo que al no hacerlo, ellos mismos tienen culpa de que la gente incurra en la insolvencia”, expresó.
Lamentó que las personas que son contratadas por las financieras y que se dicen abogados, no lo son, “son simples bandidos, tinterillos y presuntos abogado, pero finalmente son auténticos bandidos porque su procede es irregular y contra la ley, sostuvo.
Añadió que hay personas que se han quejado ante los abogados de dicho organismo, que quienes acuden a los domicilios, se meten sin autorización a ellas y disponen de bienes muebles son la autorización de sus moradores, por lo que incurren en los delitos de allanamiento de morada y robo, delitos que están tipificados en el código penal.
Dijo que esas personas deben ser denunciadas ante las autoridades, porque actúan contra los deudores sin orden judicial que ampare el aseguramiento de bienes o el ingreso a una vivienda, y añadió que otra práctica extrajudicial de la que hacen uso dichos sujetos al momento de llegar a una vivienda, es amenazar a sus moradores a quienes les dicen que de negarse al embargo, judiciales irán por ellos.
“Pero no pueden poner un pie dentro de la casa si el propietario no les autoriza o no cuentan con una orden judicial, y no pueden disponer de un bien mueble sin una orden judicial y un embargo”, explicó.
Como recomendación, dijo que cuando una persona se vea en esta situación, debe hablar de inmediato al ejército, ya que se trata de delincuentes que tratan de aprovechar su ventaja, además de que la documentación que reciben de parte de las financieras, bajo la amenaza de una confiscación de bienes, no debe ser tomada en cuenta “porque son puras mentiras y sin consecuencias”, precisó.
