Nuevo Laredo, Tamaulipas.-A pesar de las campañas de prevención para evitar que las personas se introduzcan al río Bravo, por los riesgos que existen, no se puede evitar porque se trata de una costumbre que se practica por lo general, los fines de semana, mencionó el titular de protección civil y bomberos de esta ciudad, Ernesto Rivera Gómez.
Por ello es que ocurren los accidentes y se ahogan las personas, y en este año suman ya 21 los ahogados, 19 migrantes, un bañista y un pescador que se metieron de manera imprudente al caudal del río.
Estimó que este año pueden ser más las personas que se ahoguen, ya que en todo el año pasado fueron 33 las víctimas del río.
“Tenemos indicaciones de estar al pendiente y listos para atender cualquier incidente que pueda ocurrir. El grupo de rescate acuático de bomberos se encuentra en el puente internacional dos, en horario del medio día a las 20:00 horas, los viernes sábados y domingos, para reaccionar lo más rápido posible”, explicó.
De los anuncios preventivos en las orillas del río, comentó que se han hecho campañas, pero lamentó que la cultura y la costumbre, hacen a un lado los señalamientos de advertencia, y la gente de baña sin hacer caso a las recomendaciones.
Al menos 10 anuncios preventivos sobre los riesgos que hay en el río, fueron destruidos, robados o retirados de su lugar, por lo que ya no hay.
En cuanto a los incidentes, dijo el funcionario que no ocurren muy a menudo, aunque dijo que hay desgracias que sí ocurren con cuando las personas intentan cruzar al otro lado del río para internarse de manera indocumentada a Estados Unidos.
“La recomendación es que la gente no se meta al río porque es muy peligroso, ya que tiene corriente, tiene pozos y son muchos los riesgos que no están a la vista pero que existen”, comentó.