Nuevo Laredo, Tamaulipas.- Guadalupe Morales tiene 48 años de vender en esta frontera las tradicionales figuras de Navidad que tanto gustan a los habitantes de la ciudad y al turista norteamericano, por lo que durante 44 años estuvo en el centro de la ciudad ofreciendo sus productos al lado de su padre, Alfonso Morales.
Hace cuatro años, al morir su padre, se trasladó a un costado de la presidencia municipal, en donde dentro de una caja tráiler muestras cientos de figuras de todo tipo y tamaño a precios accesibles.
Era una niña cuando acompañaba a su padre en las calles Belden y Matamoros hace casi medio siglo, pero la demanda aumentó cuando se trasladó al lugar actual, en donde cada año trae novedades que atraen tanto a propios como a extraños.
“Este año traemos algunas novedades, además de las piezas principales de un nacimiento de barro”, expresó.
Dentro del pequeño pero bien distribuido espacio hay además de las siete figuras del nacimiento tradicional, ángeles, demonios, pescadores, animales de corral, plantas, ermitaños, ovejeros, arrieros y los clásicos animales de nacimiento del Niño Dios, como son la mula, el burro y la mula.
Además, están los pastores, nopales, casitas, árabes, camellos, árboles, magueyes y todo tipo de figuras para este tipo de ofrendas o nacimientos.
“En figuras tenemos pues…¡Uh! pues no sé, ni nos hemos puesto a contarlas, pero deben ser cientos, y hay mucha variedad…”, explicó tras confiar en que este año sea igual que el anterior, cuando vendieron lo suficiente como para no quejarse.
Para Guadalupe lo importe de su trabajo es fomentar la tradición de la venta de figuras de nacimiento, y dijo que cada año esta tradición cien por ciento mexicana va en aumento, al menos en esta frontera.
Dijo que al fomentar este tipo de tradiciones, las nuevas generaciones deben interesarse en continuar lo que los padres les hereden en este tipo de actividades culturales, “y no porque vivamos en la frontera nos tiene que ganar el Santa Clós. Que gane el Niño Dios y no el Santa Clós”, expresó.
Apenas tiene unos días de haberse instalado, y familias completas, turistas de otras partes de Tamaulipas y de Texas, acuden a ver las figuras para después comprarlas.
Y es que el colorido, los bien hecho de las figuras, lo curioso de algunas y la tradición, hacen que la personas se acerquen a este remolque y compren aunque sea una sola pieza, las que tiene el mismo costo del año pasado, que es desde los 15 pesos hasta los 500 una figura grande.
Este peculiar remolque estará en ese lugar hasta el 24 de diciembre, y además de ofrecer las figuras a la venta, está el Niños Dios, la casita de madera y los nacimientos integrados por las 8 figuras, como son la virgen María, San José, el Ángel, los Tres reyes Magos, la mula y el buey, y el Niño Dios.
