Tras un largo debate, la Cámara de Senadores de México aprobó una reforma financiera que busca impulsar el crédito en la segunda mayor economía de América Latina, al hacer más fácil para los bancos el cobro de las garantías de préstamos incobrables.
La propuesta está dirigida a los bancos financieramente conservadores de México, que cuentan con altos niveles de capital, pero que prestan mucho menos que sus contrapartes en otros países.
La reforma, que salió adelante pese a las múltiples observaciones planteadas por el principal partido de izquierda, el Partido de la Revolución Democrática, PRD, será enviada al presidente Enrique Peña Nieto para su promulgación.
Precisamente el secretario general del PRD, Alejandro Sánchez Camacho, reprochó a los senadores del Partido Revolucionario Institucional, PRI, y del Partido de Acción Nacional, PAN, el haber aprobado una reforma que, según su opinión, criminaliza a los morosos y favorece a los grupos financieros con poder.
Por su parte, la Asociación de Bancos de México declaró que la reforma fomentará el crecimiento del crédito en el país.
La nueva legislación financiera es parte de un programa de reformas de Peña Nieto, que busca aumentar el crecimiento económico del país mediante el reacondicionamiento del sector energético y la apertura del sector de las telecomunicaciones.
El gobernador del banco central, Agustín Carstens, calculó que el proyecto de ley puede sumar alrededor de 0,5 puntos porcentuales al crecimiento en dos o tres años.
Fuente:
BBC.co.uk
