México es un país mucho más relevante de lo que generalmente los propios nacionales consideran y a pesar de las desigualdades socioeconómicas y las cifras de pobreza abultadas, se puede hacer negocio girando la rueca de las enormes oportunidades.
Basta por ejemplo ver lo esencial que es la economía mexicana para España sobre todo en los tiempos más aciagos del estancamiento de la economía ibérica que ha tomado “como dos muletas” su presencia en México y su expansión hacia otros países de la región latinoamericana.
Sólo así se puede entender que el 60% de los ingresos de las empresas españolas que cotizan en el IBEX (es el principal índice bursátil de referencia de la bolsa española) provengan de América Latina.
No hay forma de negar que el sistema de pagos en México está “españolizado”, los dos bancos más importantes en activos, créditos y administración de cuentas de ahorradores y depositantes son BSCH y BBVA.
En el tridente de las aportaciones de ganancias y beneficios para ambos grupos, Brasil, México y Chile, significan más del 50% de lo que ingresan en caja las matrices ibéricas.
La internacionalización del capital español desde la década de los noventa en la región, más las exportaciones, coinversiones y asociaciones estratégicas tanto en México como en América Latina han coadyuvado a que el golpe de la crisis del ladrillo no haya sido de mayor magnitud lastrando durante mucho más tiempo el estancamiento del PIB español.
De hecho, la OCDE pronostica un crecimiento del 0.5% mientras el Ministerio de Economía un 0.7% para 2014; aunque sea magro significa dar un paso firme para la salida real del estancamiento de los últimos años.
De alguna forma ha contribuido esa internacionalización de la empresa española, no sólo las 400 grandes que están incubadas en América Latina sino las 59 mil empresas de todos los tamaños inmersas en la actividad exportadora, muchas interconectadas con la región.
Sin la salida hacia el exterior como opción ante la crisis interna, seguramente el colapso hubiera sido mayúsculo.
¿Qué está aportando México a España para ayudarla a iniciar un nuevo ciclo en su economía? Aquí lo más puntual: 1) Beneficios reales para la IED española que lleva varios años o casi dos décadas insertada no únicamente en el sistema financiero mexicano sino en un amplio espectro de la producción y el sector servicios. 2) Flujo de exportaciones ibéricas con fuerte presencia en tiendas departamentales o de autoservicio y muchas pymes mexicanas dedicadas a vender desde la ropa, zapatos, chaquetas de piel, vinos, quesos, jamones ibéricos, etc. 3) Asociaciones y coinversiones en negocios en todos los niveles trátese de grandes, pequeñas o medianas empresas. 4) México está siendo receptor de flujo de mano de obra y profesionales españoles convirtiéndose así en una nueva oleada de emigración española hacia tierras aztecas. Las ofertas de empleo en universidades, empresas y hoteles son la puerta de entrada. 5) Contratos laborales para artistas, actores, cantantes y toreros españoles. 6) Presencia del capital mexicano para comprar empresas españolas en territorio español. 6) Compra de activos inmobiliarios por parte de inversores privados mexicanos en suelo español. 7) Adquisición de equipos de fútbol para salvarlos de la crisis como el gesto que tuvo Carlos Slim con el Real Oviedo. 8) Posibilidad de que el capital azteca continué comprando empresas ibéricas ubicadas en distintos ámbitos de la producción. 9) Firma de acuerdos para generar empleos en territorio español a través de las TIC como lo hizo Centro Fox con UST Global.
A COLACIÓN
Hace un par de días me preguntaron, cuándo el magnate Carlos Slim haría su verdadero desembarco de inversiones en España, un poco consternados de que no mostrara interés por un sector en especifico como si España no fuera una tierra de oportunidades.
Es verdad que más allá del run run que Slim busca comprar entre un 5% a un 10% de Repsol, su área de interés por el tema energético, nada más allá se sabe, después de las oficinas que compró en 2012 a La Caixa se desconoce si sus asesores observan potencial de rentabilidad con otra institución bancaria, o en activos inmobiliarios o en otra empresa.
Francamente ante el cuestionamiento yo les dije que consideraba que Slim haría acto de presencia en España quizá más pronto de lo que imaginamos, muy posiblemente él esté esperando que termine la corrección del mercado; que la banca española pase las pruebas de estrés, ver cómo evoluciona el índice de morosidad bancario y cómo van reactivándose los indicadores de la demanda interna y aquellos que revelan el consumo. Pero si no es Repsol, estoy segura que llegará su momento estelar.
PD. *Economista. Mi twitter es @claudialunapale. Mi blog es http://claudialunapalencia.blogspot.com
