La muerte, o más precisamente el homicidio del periodista Gregorio Jiménez, quien trabajaba en algunos diarios de Veracruz, es un llamado de alerta y vuelve a prender los focos rojos en el gremio periodístico, debido a las enormes irregularidades que existen en torno a este tipo de homicidios.
El contexto en el que fue asesinado, por la absurda hipótesis de que se trató de una venganza personal, de las declaraciones anticipadas de un diputado local que dijo que estaba vivo, y la irresponsable actitud del gobernador de esa entidad, Javier Duarte, de minimizar el asunto, muestran una vez más que los periodistas, cuando hacemos señalamientos y críticas sobre abusos y corruptelas cometidos por servidores y funcionarios públicos y otras personas, molestan.
Por ello es que México se ha convertido en el país más peligroso del mundo para los periodistas, y Veracruz en la entidad de más riesgo para esta actividad, y como ejemplo, el año pasado en dicho estado hay documentadas 38 agresiones contra periodistas, 8 de ellas fueron secuestros, amén del asesinato de la periodista Regina Martínez, de la revista Proceso, y de Sergio Landa, que aún se encuentra desaparecido.
De acuerdo a denuncias de la ONG “Campaña por un Emblema de Prensa”, en México las agresiones contra periodistas se agravan rápidamente.
Durante mayo del año pasado cuatro periodistas perdieron la vida, tres en Veracruz, siendo el caso más sonado el de Regina Martínez, de la revista Proceso, además de Sergio Uribe Alvarado, del Diario de Colima.
El viernes 18 de mayo del 2012, fue encontrado el cuerpo del periodista Marco Ávila, quien trabajaba en los periódicos El Regional y El Diario de Sonora, y son solo algunos de los casos que fueron documentados, ya que existen muchas agresiones que por temor de los propios periodistas, no son denunciadas.
Pero este asesinato, el de Gregorio, movilizó a organismos y organizaciones nacionales e internacionales que aun después de su innecesaria muerte, claman el esclarecimiento de los hechos.
Organizaciones como Periodistas de a Pie, Reporteros sin Fronteras, Sociedad Interamericana de Prensa, la ONU, y decenas de periodistas de todo el país, se están movilizando para aclarar los motivos por los que fue asesinado Gregorio, y para establecer mecanismos más eficaces de defensa de los periodistas.
Esperemos que la muerte de Gregorio no haya sido inútil, y que los periodistas de todo el país nos organicemos, como ya se está haciendo, para obligar a las autoridades a que respeten nuestro trabajo, y a que, cuando hagamos trabajos de investigación, tengamos el respaldo que requerimos para sentirnos seguros.
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En su visita a Nuevo Laredo, la semana pasada, el gobernador Egidio Torre Cantú fue muy claro cuando dijo que en las próximas elecciones recuperaría Nuevo Laredo, y aunque la gente que asistió al evento en el que el mandatario le dio el espaldarazo a Jesús Valdez Zermeño y a Jalheel Abdala como presidente y secretaria general del PRI local, respectivamente, lo que vi no fue precisamente unidad en torno al partido, sino incertidumbre.
Así lo vi porque es muy claro que en el PRI la unión no se dará ni por decreto del gobernador ni por obra y gracia de nadie, ya que tendrán que trabajar muy duro si es que desean hacer lo que Egidio les encomendó.
Si entendí bien, dijo Egidio que recuperará lo que le pertenece. ¿Es que acaso un municipio y sus habitantes son propiedad de los gobernantes?
Lo que debe hacer el PRI en vez de un mar de declaraciones vacías y sin sentido, es trabajar pero no para recuperar lo que ya se perdió, sino para convencer al electorado que aprendieron la lección y que serán más humildes.
Faltan muchos meses para las elecciones federal y más para las locales, por lo que en ese partido aún hay tiempo para que trabajen y para que demuestren que aunque siga siendo el mismo PRI, la visión de sus dirigentes será diferente.
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En lo que se refiere al PAN, por ahí está circulando la versión de que el diputado local Enrique Rivas Cuellar tuvo un fiestón el pasado fin de semana en el Club Campestre, en donde hubo de todo, incluso se menciona ya en las redes que contrató nada más que al grupo musical norteño, Los Tucanes, cuyo costo es de 750 mil pesos aproximadamente por función.
La pregunta que algunos colegas se hacen es, ¿quién y cómo se pagó la presentación de este grupo?
Algo similar se comenta también en los corrillos de la presidencia municipal, y es el hecho de que el también diputado local pero por el PRD, Jorge Valdez Vargas, se casará en el puerto de Cancún en las próximas semanas, y que para ello rentará un avión enterito y completito para unos 200 invitados.
Me pregunto también en caso de ser cierta esta versión, ¿quién pagará este caprichito?
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Hasta mañana
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