Nuevo Laredo, Tamaulipas.-Desde Oaxaca, un grupo de 25 artesanos llegó a la ciudad para ofrecer sus productos; se instalaron en los pasillos del Palacio Federal desde el sábado, y se irán hasta el 17 de este mes, por lo que confían en que las ventas les permitan solventar sus gastos, ya que en sus lugares de origen escasea el trabajo y vivir de la agricultura ya no es negocio.
Vienen de la ciudad de Oaxaca, Mitla y Tuxtepec, y aunque algunos son de Puebla, pertenecen a varias organizaciones de comerciantes y artesanos que durante todo el año viajan a diferentes estados del país, para ofrecer sus productos, ya que es lo único que saben hacer.
Ezequiel es uno de ellos, es de Tuxtepec, y de sus 47 años de edad, 8 los ha dedicado a la venta de productos artesanales de Oaxaca, oficio que sus padres le enseñaron y que ahora enseña a sus hijos.
Ya conoce varios lugares del noreste del país, y aun que pertenece a una organización específica, cuando un grupo viaja a una exposición, le llaman.
“Hay mucha competencia de estos y casi no se vende en Oaxaca, por lo que viajamos por todo el país, pero cuando no hay viajes nos vamos a trabajar al campo, pero ya no produce porque lo pagan muy barato y no nos conviene”, señaló.
Debido a ello, dijo que mucha gente, familias enteras han emigrado a otras ciudades, al norte del país e incluso se han ido a trabajar a Estados Unidos, como indocumentados, ya que en su lugar de origen por toda una jornada laboral no pagan más de 150 pesos por día.
“Sí hay trabajo pero está muy barato, por lo que la gente se va a otros lugares”, explica.
Marisela es de Mitla, y aunque tiene 25 años de edad, es casada y viaja con su esposo en un camión para vender los productos artesanales que dice, ella misma elabora, por lo que son más baratos de los que vende in intermediario.
Ella vende ropa muy vistosa y de mucho colorido, como se usa en aquella región del país, y son bordados a mano, detales que se ven en los vestidos de gala, blusas de colores y camisas con bordados elegantes y discretos.
Los pecios que ofrece son variados, y los hay desde 250 y 300 pesos, hasta mil 500 un vestido y dos mil 200un huipil bordado a mano de manera sobria y paciente.
Aunque el resto del grupo visita la ciudad por tercera ocasión, para Marisela es la primera vez, por lo que espera que las ventas sean buenas, y no se queja porque en los dos días que lleva en la ciudad, ha vendido bien.
De todo como en botica
Filiberto es un artesano de Mitla y es uno de los dirigentes de este pequeño grupo denominado ‘Arte y Expresión Oaxaca’, y al igual que el resto de los comerciantes, espera que durante el tiempo que estén en la ciudad, las ventas sean buenas, ya que en las ocasiones anteriores les ha ido bien.
Aunque son pocos, la variedad de productos que ofrecen, es amplia, y hay la ropa típica de las 7 regiones de Oaxaca, dulces regionales, juguetes artesanales, licor y mezcal de frutas, los famosos alebrijes, zapatos de cuero, música, nieves de sabores y el tradicional mole negro, así como las famosas tlayudas de tortilla con queso.
Aunque no es fin de semana, los pasillos del Palacio federal se encuentran llenos de gente que compra, otros que van a curiosear, y otros, como este reportero, que acudió a tomar el testimonio de estos personajes cuyo oficio lo han aprendido por generaciones enteras, al formar parte de los grupos étnicos de Oaxaca, como son los Mixtecos y los Zapotecas.
Y aunque unos son de la montaña y otros de la costa, la tradición y la necesidad los unen para un mismo fin: dar a conocer su cultura a través del arte y de las artesanías que ellos ismos elaboran con tenacidad y paciencia.
