Nuevo Laredo, Tamaulipas.- La tormenta del domingo, aunque era esperada, fue de mayor intensidad a la pronosticada, ya que dejó varados en calles encharcadas a 16 vehículos, 20 árboles tirados que obstruyeron la vialidad en algunas arterias de la ciudad, aunque se esperaba una cantidad mayor, mencionó el titular de protección civil y bomberos, Ulises Ochoa.
De los arroyos cuyo nivel superó el 75 por ciento debido a la cantidad de agua que les cayó, fueron El Coyote y sus ramales, “en virtud de que la lluvia fue intensa en lapsos, pero muy constante”, comentó.
Dijo el funcionario que durante la mañana el lunes personal a su cargo, estaba retirando los árboles y ramas caídas que obstruían algunas vialidades.
Señaló que durante la semana pasada se dieron avisos de que habría lluvias muy fuertes con caída de granizo, aunque reconoció que solo se trata de pronósticos, ya que al final de cuentas no llovió durante toda la semana pasada a pesar de que se estuvo anunciando, y que en cambio el domingo la lluvia fue muy intensa.
“Pero fue suficiente para provocar algunos encharcamientos importantes además del crecimiento de los arroyos incluso al 75 por ciento del nivel de su cauce”, reiteró el funcionario.
Pero reconoció que la intensidad de la lluvia rebasó por momentos la capacidad de respuesta de la corporación que dirige, aunque mencionó que le brindó apoyo a tránsito para dirigir las vialidades que se vieron interrumpidas por los encharcamientos o por la falla en los semáforos, con la finalidad de evitar accidentes en los cruceros.
Añadió que las lluvias seguirán en los próximos días hasta en un 60 por ciento, por lo que dijo que estará al pendiente ante lo que pudieran provocar las lluvias.
