Nuevo Laredo, Tamaulipas.-œAnte la presente crisis hay que ser muy conservadores en las inversiones que los empresarios vayamos a realizar, porque no son tiempos buenos para invertir ni para hacer negocios o para realizar compras, sugirió el presidente de Coparmex en la ciudad, Héctor de la Miyar Garza.
Mencionó que si se pensaba ampliar una línea de producción o un negocio por expansión, con la compra de equipo, mobiliario o maquinaria, se debe ser muy conservador, y si se pensaba hacer más grande una empresa, se debe pensar más en reducirla o ampliarla pero en otra escala para no frenar el crecimiento natural de las empresas.
œSi se hace una inversión se debe hacer pero a otra escala, para no frenar las empresas o los proyectos
Añadió que realizar una inversión en estos momentos puede frenar, lo que afecta a los giros satélites que existan al derredor de los negocios y a los proveedores, explicó el también agente aduanal.
Pero además, dijo de la Miyar que el alto costo del dólar también afecta a los empresarios que compran sus insumos en moneda norteamericana, y destacó que en la frontera norte de México, el alto costo del dólar y la devaluación constante de la moneda mexicana, se nota más que en el interior de la Repíºblica.
œAquí en la frontera manejamos más el peso-dólar-peso, y también es el lugar en donde se nota más en el bolsillo, y esto puede repercutir para la industria del comercio en la ciudad, no para las maquiladoras, porque ellas manejan insumos que les envían sus propios proveedores, explicó.
Pero añadió que con las devaluaciones las exportaciones son más atractivas, y que por ello todo se encamina hacia las maquiladoras con un incremento del empleo y una baja en el desempleo, porque los corporativos de Estados Unidos ven una ventaja del dólar sobre el peso, y porque envían más mercancía y contratan a más personas.
œEn México hay maquiladoras o ensambladoras, y las importaciones definitivas, que son bienes o productos terminados para la compra venta, y es a estas a las que se puede afectar porque se compra en dólares y se tiene que vender al tipo de cambio en pesos. Por eso cuando se acude al negocio se prefiere el producto nacional que el extranjero, y por eso las importaciones tenderían a bajar, explicó.
Bajo estas condiciones, reiteró de la Miyar que las exportaciones se benefician en la balanza general del comercio exterior, sobre todo de las que vienen de un proceso de producción de ensamble que tienen que regresar a Estados Unidos.
œPor eso se ve la disparidad de la balanza, ya que las devaluaciones nos ayudan a exportar, pero no exportamos productos nacionales, solo exportamos el mismos producto que llega de Estados Unidos para que se transforme en algo que se regrese, y su precio lo aumentan porque les conviene más, reiteró.
