Nuevo Laredo, Tamaulipas.-En esta ciudad podría haber más de 40 mil personas que viven en pobreza alimentaria, si se toman en cuenta el censo de población y vivienda elaborado por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), elaborado en el año 2015, y el padrón de personas que apoya la Fundación Cáritas de Nuevo Laredo.
Desde que fue declarada la pandemia del COVID-19 a inicios de marzo, se espera que las filas de la pobreza se incrementen en esta ciudad, y se sumen al ejército de desempleados y subempleados que ya existe, y que de acuerdo a la Cámara de Comercio, puede llegar hasta las 5 mil personas que se dedican al comercio informal.
Aunque no existen datos precisos de la cantidad de pobres en la ciudad, de acuerdo al censo de población y vivienda elaborado por el Inegi en el año 2010, y de encuestas intercensales, la población en Nuevo Laredo en solo 4 años creció en 28 mil 332 habitantes, el nivel de pobreza extrema, de acuerdo a la carencia de sus necesidades más elementales aumentó.
Los datos indican que en el censo del 2015 24 mil 420 personas habitaban en viviendas de mala calidad 6.5% del total), mientras que 17 mil 512 no contaban con servicios básicos (4.7%), y otras 46 mil 384 no tenían acceso a una alimentación adecuada (12.3%).
En ese sentido, la Fundación Cáritas de Nuevo Laredo cuenta con un padrón cercano a las 11 mil personas que de acuerdo a su presidenta, Elda Elizondo, se ubican en al filas de la pobreza extrema al carecer de lo más básico, como son una vivienda adecuada, servicios básicos, acceso a la salud y a la alimentación.
De esto dijo: œEstamos viendo que la pobreza está aumentando, y lo vemos con la gente que no tiene empleo, y ya se están acercando a nosotros personas que antes no venían, para pedir apoyo, por lo que queremos prevenirlo con el apoyo que podamos ofrecerles para solucionar sus problemas.
Dijo que son varias las organizaciones como los clubes Rotarios, que están ayudando a estas personas que perdieron sus empleos, como clubes de servicio y la sociedad organizada, los que se han acercado a la Fundación para solidarizarse con los más necesitados.
Con los apoyos obtenidos, dijo Elizondo que tratan de salir delante de esta crisis, y confió en que la actual pandemia que afecta a los más vulnerables, no incremente la tasa desempleo y por consiguiente, la pobreza, al sumarse al listado los migrantes, los reos que están en el penal, y algunos indigentes que se encuentran en los albergues, lo que incrementa la cantidad hasta 11 mil personas, que puede traducirse cada una en una familia de cuatro integrantes, que se acercaría a la cifra ofrecida por el Inegi, que fue de 46 mil 384 personas en pobreza alimentaria.
Pero dijo que los apoyos son variables porque la cantidad de personas que busca este apoyo también es muy variante con las personas indirectas que buscan apoyo con Cáritas, como los migrantes, quienes están en los centros de rehabilitación, y los reos que también están en el padrón de beneficiarios de este organismo altruista.
