Nuevo Laredo, Tamaulipas.- Aunque aún no se cuenta con los datos más recientes, el dengue ya causó la primera víctima en un paciente de un hospital privado, además de un caso más del tipo hemorrágico y 47 del clásico, pero de acuerdo al médico Jorge Ramírez Rubio, se espera que sean más los casos cuando el Consejo Municipal de Salud se reúna el próximo miércoles.
Destacó el presidente de la comisión de salud en el cabildo, que esta enfermedad provocada por el piquete de un mosquito, se puede complicar en pacientes que estén infectados de COVID, ya que mientras a quien tenga dengue se les medica para que su sangre coagule, en los casos de COVID, el tratamiento es para que no coagule la sangre del paciente.
La semana pasada el registro de casos de dengue por la Secretaría de salud fue de 47 casos, uno hemorrágico, pero dijo el médico que en una semana la cantidad se ‘disparó’ de 12 a 47 casos, lo que consideró alarmante por una posible combinación que pueda haber de esta enfermedad con el COVID, que hasta el momento no ha ocurrido.
“La semana pasada ya se había reportado un aso hemorrágico, pero en el hospital México Americano reportaron ya una defunción por dengue hemorrágico, pero esta semana nos entregarán el último reporte de casaos de dengue”, explicó.
“El problema del dengue es que ya tenemos rato trabajándolo, pero es diferente al año pasado cuando fueron solo 4 o 5 casos contra los 47 que ya tenemos desde la semana pasada, y ya es alarmante la situación”, explicó.
Añadió que la combinación de dengue con el COVID es mortal, porque en el dengue el problema es que se alteran los factores de coagulación, y el paciente comienza a sangrar, y eso es lo grave de esta enfermedad es cuando el paciente comienza a sangrar por lo que se le da medicamento para coagular al sangre, explicó el médico.
Por el contrario, dijo el médico, en el COVID el problema en el enfermo es que la sangre se coagula, y el problema es que se le aplican anticoagulantes, pero si a este paciente la da dengue, se le puede provocar que el dengue se convierta en hemorrágico.
“Los tratamientos con totalmente opuestos, mientras en uno queremos que coagule, en otro queremos que no coagule, entonces nos complicaría mucho los tratamientos, y en el caso de una combinación eso es lo que sucede”, refirió tras mencionar que por fortuna no hay un registro de casos combinados de estas dos enfermedades.
