-Están decepcionados por la falta de apoyos, dicen.
Nuevo Laredo, Tamaulipas.- Tres proyectos agropecuarios que ocho ejidatarios presentaron ante el gobierno de Tamaulipas, fueron rechazados durante la administración del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, por lo que los 8 millones autorizados por el gobierno federal, regresaron a sus arcas al no haberse utilizado ni en tiempo ni en forma, reveló José Manuel Silva Anguiano.
Quien es responsable de la Asociación de Usuarios de Riego 050, en este municipio, mencionó que dichos proyectos fueron presentados ante el gobierno estatal y la Comisión Nacional del Agua (Conagua), para su aprobación, ya que trata de la modernización y aplicación de innovación tecnológica en los procesos productivos agrícolas y pecuarios, además de aumentar el ahorro en el uso del agua del río Bravo.
“Por falta de recursos económicos estos proyectos no se nos aprobaron, a pesar de que la federación aportó lo que le corresponde, pero el gobierno estatal no lo hizo, y esos recursos se regresaron al gobierno federal”, comentó Silva.
Es por ello que las carpetas no se autorizaron porque el gobierno estatal no lo hizo pese a tener los recursos económicos, y al retrasarse las inversiones en el campo, los productores no ven avances ni pueden tecnificar sus riegos.
Y es que ese dinero serviría para modernizar los sistemas de riego, y ser automatizados los motores y las bombas, para que los canales de riego dejen de estar a cielo abierto, y se hagan por medio de tuberías para el acarreo y distribución del agua.
De los 8 millones de pesos en los tres proyectos, el gobierno federal aportaría el 50 por ciento; el gobierno estatal lo haría con un 20 por ciento, mientras que los usuarios aportarían el restante 30 por ciento del capital mencionado.
Una larga espera
“Pero los usuarios se quedaron en calidad de espera, y ya traemos otras gentes interesadas, pero primero en tiempo y primero en derecho. Y es muy difícil negociarlos con el nuevo gobierno estatal porque la federación tiene plazos para aprovechar los recursos, y si no se hace así, se regresa el dinero”, explicó.
De tal forma, la negociación del recurso sería hasta el inicio del nuevo ciclo de siembra, el de Primavera-Verano (PV) que inicia hasta febrero o marzo del próximo año, y se trata de políticas gubernamentales que al no realizarse, afectan a los productores que esperan estas inversiones para mejorar sus sistemas de riego y de cultivo.
Como ejemplo, el ejido Miguel Alemán, sería beneficiado con estos proyectos para tecnificar el riego y olvidarse de los canales y hacerlo todo por tubería, el riego mediante pivote central en al menos 75 hectáreas en dicho ejido, pero todo quedó detenido.
El resto de los ejidos no lo harán porque el costo de la energía eléctrica es incosteable bajo las actuales condiciones y sin apoyos gubernamentales, lo que desanima a los productores para mejorar sus hatos ganaderos y sus tierras de cultivo.
“Prefieren alimentar el ganado y dejar los proyectos para después, o lo que es peor, malbaratan sus animales para que no mueran de hambre, o se retirar de la actividad agropecuaria”, expresó.
