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¡Agravios y desdenes!

 

El presidente anticipadamente como es su costumbre atacó a la ministra presidente de la SCJN, porque no se puso de pie para aplaudirle, en su llegada al teatro de la República, donde se llevaron a cabo los festejos del 106 aniversario de la carta magna, por ese simple hecho el mandatario arremetió contra la ministra.

 

La ministra coherente con su decir y hacer se mantuvo firme ante los ataques y desdenes del mandatario, no dio lugar a la polémica, mucho menos a la politización del caso, el presidente esperaba respuesta brava, en su lugar, fue un tersa e inteligente postura de la ministra.

 

En este sentido la visión del presidente es muy distinta a la mayoría de los mexicanos, en su mundo rendirle tributo y pleitesía es con lo que se mantiene su ego y calma su ira, pero no fue así, la ministra mostró respeto y no tenía por qué ponerse de pie la representante de uno de los tres poderes que conforman la nación. Pero esto motivo para los ataques viscerales del presidente, que no entiende que en una democracia como la nuestra pensar distinto no, no hace enemigos.

 

Los desdenes del presidente también llegaron al congreso, el presidente de la cámara baja pidió diálogo con el mandatario, pero en lugar de recibir una muestra de madurez política, recibió insultos Santiago Creel, de parte del ejecutivo, y dijo que no al diálogo, que no porque lo único que querían eran seguir con las componendas y los privilegios, además de moches, no sé a qué se refería Andrés Manuel, si alguien de su equipo, que vaya que hay muchos con esas mañas dentro de su equipo.

 

Está en una burbuja donde su verdad es la única y absoluta, no hay pausa para la mediación y el diálogo, no hay en este momento entrada para nuevas ideas, para el entendimiento; o se hace lo que dice el presidente o se es su enemigo y es exhibido en las mañaneras como traidor a la patria.

 

Por ese camino estamos a un tris de la violencia política, donde la cerrazón de presidente es el principal caldo de cultivo para la galvanización de los desencuentros, le han tomado la medida y saben que su mecha corta, es también su kriptonita.

 

En este sentido, mucho se tiene que hacer porque mientras eso pasa, en un país de una sola idea, y de un solo perfil, el camino al autoritarismo es muy corto y podría ser el siguiente factor de toma de calles, avenidas, por una sociedad civil harta de tanto desplante y soberbia.

 

Pero mire también en Tamaulipas hay elecciones, esta semana que paso, el mandatario llego a la entidad para realizar su agenda el fin de semana; de los acuerdos aún no sabemos nada, pero sí que las esperanzas dadas al gobernador Américo Villarreal, dejaron un buen sabor de boca.

 

Para este año el presupuesto será superior a los 70 mil millones de pesos en la entidad, serán 24 mil millones de pesos más a los ejercidos en el último año del gobierno anterior, con lo que se espera que el desarrollo en todos sus sentidos se canalice una vez pasada la elección extraordinaria por aquello de los vetos electorales; sin lugar a dudas el cabildeo del gobernador Villarreal Anaya, dieron buenos frutos, los tamaulipecos esperamos mucho de este nuevo ciclo político en la administración estatal.

 

Hablando de desdenes ya para finalizar esta columna, déjeme decirles que las campañas de los tres aspirantes para ocupar un escaño en el senado, sigue en la misma tónica, el frio de la sociedad tamaulipeca muestra que ninguno de los aspirantes a tenido los arrojos para ir en busca del voto ciudadano, ese que no necesita que lo acarreen o alguna dádiva social.

 

La burbuja en la que navegan tanto Imelda Sanmiguel, representante de la Alianza Va por Tamaulipas, no ha salido de la militancia del PRI y del PAN, además de algunos resquicios del PRD, que aún conserva sobre todo en el sur del estado, fuera de eso no hay nada nuevo.

 

Para el abanderado del Verde, Manuel Muñoz Cano, aún no se termina de cuajar para qué lado jalara la familia que lo cobijó, la familia Hernández Flores, del exgobernador Eugenio; y le dio fama y oportunidad política, después de que su padre el diputado Manuel Muñoz Rocha, fue noticia allá por 1993, dejando vetada prácticamente a su descendencia.

 

En su propaganda sigue empeñado hacerles publicidad a los Cabeza de Vaca, aunque el gobierno actual es morenista, no hay un atrevimiento de señalar nada en contra del actual gobierno de parte del candidato Verde, la explicación de sus proyectos de ser electo es explicados en tianguis y caminata, de ahí no se ha movido.

 

Para el Morenista-petista José Ramón Gómez Leal, tampoco hay nada nuevo, su teoría de la campana está ligada a YSQ y al doctor, donde prácticamente 5 años después su discurso sigue siendo el mismo. Y su caminar está dentro del sistema de apoyos de bienestar social y de adultos mayores.

 

La sociedad civil sigue olvidada por los candidatos, esa puede ser la gran sorpresa que se pudiera dar el próximo 19 de febrero.

 

Es Cuánto

 

De Aquello y lo demás…

 

Para los que saben y entienden la política saben que, en Matamoros, el alcalde Mario López Hernández, lleva la mano en las elecciones que vienen, los cuates Granados deberían de saber por dónde corre el aire. Además, también la flamante secretaria de finanzas, Adriana Lozano, podrá disfrutar de su año laboral, ya después de los aguinaldos definirá si busca o no ser candidata a la alcaldía.

 

Mientras eso pasa el equipo del estado que está en los distintos puestos en esa ciudad, llámese Oficina Fiscal, CREDE, Registro Civil, UTM, ITAVU, SEBIEN, difícilmente acarrean votos a una causa, a lo mejor problemas si y muchos, porque su ambición de crecer rápidamente les impide ver con claridad el panorama.

 

En la próxima elección los aliados de JR, deberán de tener claro que en Matamoros hay muchos votos, pero que ponerlos en las urnas, dependen de quien los lleve, y es ahí donde tiene la mayor encrucijada el candidato.

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