Limpieza Pública

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Muchas veces escuchamos o leemos a periodistas, comentaristas, politólogos y personajes de la comunicación, señalar su punto de vista, leer o interpretar boletines y comunicados de prensa, responsabilizando a la comunidad de tal o cual situación.

Incluso muchos funcionarios de todos los niveles han señalado sobre la “descomposición social” de la sociedad mexicana, cuando se refieren a las actividades delictivas, cuando se habla de acciones de la delincuencia organizada.

Confieso que nunca he estado de acuerdo con los puntos de vista de quienes acusan a la sociedad, por una muy sencilla razón: El rumbo social no lo determina el ciudadano común, lo determinan las instituciones gubernamentales.

Soy de los que opinan que la familia, la escuela, la iglesia y las políticas públicas son quienes determinan el tipo de ciudadano que estamos formando desde la primera infancia hasta la adultez, pasando por todas las fases del desarrollo humano.

No podemos obviar que, en el caso de la familia, siempre estará sujeta a losplanes y programas que determina la autoridad: municipal, estatal o federal.

El título de hoy se relaciona a la comisión de delitos que en las últimas cuatro décadas suceden en el territorio nacional. De ahí la insistencia sobre la descomposición social que NO corresponde a la familia mexicana.

La pésima conducta de los individuos, surgen por el conjunto de malas políticas que repercuten en oportunidades negadas para que un sector determinado, por lo que cometen delitos para conseguir satisfactores que le han sido negados.

Los grupos delincuenciales existen porque las autoridades no han sido capaces de controlar, disminuir y prescindir de su existencia, Por el contrario, su desarrollo de expansión y desarrollo ha provocado una riqueza que les permite un crecimiento de la corrupción de autoridades, incomparable.

En este mismo tema, pero ahora ejemplificado de la responsabilidad que pretenden compartir, me refiero alas consecuencias de las torrenciales lluvias en semanas recientes, ciudades de todos tamaños en el país presentan calles inundadas y las autoridades en voces de la gente de televisión, radio y prensa escrita, culpan a la sociedad de arrojar todo tipo de basura en la vía pública… ¿Eso es cierto? ¡NO!

Una de las obligaciones de las autoridades, usted y yo lo sabemos, es la limpieza pública, por ello hay gente y maquinaria que su tarea es barrer, limpiar y mantener sin basura todas las áreas públicas.

Es más sencillo siempre culpar a otros.

Dentro de esas tareas de limpieza también se cuenta el servicio de recolección de basura en las calles, colonias, fraccionamientos, etc. Para los funcionarios es más fácil culpar a los ciudadanos por dejar la basura en la vía pública, desde una colilla de cigarro hasta colchones y muebles inservibles. No es una suposición que el servicio de limpieza pública municipal tiene el encargo de hacer estas tareas, porque es lo que marca la Ley.

Los jóvenes que ingresan a los grupos delincuenciales no es porque su familia les empuje. La única razón se debe a las pésimas políticas públicas en educación, deporte, empleo, desarrollo social, etc.

En el caso de los tapones de basura que provoca encharcamientos, no es porque la gente sea sucia o desaseada, la razón es simplemente porque las autoridades locales no cumplen a cabalidad con el servicio de limpieza urbana y el de la recolección de basura. El ciudadano cumple con sacar su basura el día y la hora que el mismo ayuntamiento señaló. Que el camión recolector no pase, ¿es responsabilidad del ciudadano?

 

EL PRESIDENTE LÓPEZ CONTRA INVERFOX

La titular de atención ciudadana de la presidencia de la República, Gabriela Romero Martínez, dirigió un oficio a la Dra. Blanca Nidia González Villarreal, donde le comunica el interés del presidente Manuel López para dar atención a las denuncias que se presentan contra la empresa INVERFOX Strategic Capital Agency SAPI de CV, que dirige Luis Alberto Zamorano donde se habla de un fraude multimillonario.

Por lo anterior, la alta funcionaria del gobierno federal informó que el registro de seguimiento es con el folio de seguimiento No. 202240724GOVBQC, por lo que los inversionistas defraudados ahora tienen la seguridad de que la lucha por la recuperación de los capitales va en serio.

 

 

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