El Título de hoy se relaciona con una cinta cinematográfica (1981) dirigida por Julián Pastor, basada en la novela del mismo nombre de quien fuera gobernador de Veracruz, Miguel Alemán Velasco y protagonizada por Rafael Inclán, Gregorio Casal, Diana Bracho, María Montaño, Tito y Víctor Junco, Eric del Castillo y otros.
La sinopsis es de un mexicano -Rodolfo Martínez- oriundo del pueblo de Valle Verde en la provincia mexicana. Martínez es un hombre gris no solo por sus problemas financieros, sino por su flojera congénita y su tache comunal como mácula.
Lo interesante es que el personaje inventa la existencia de un noble antepasado en su familia, por lo que corre la voz de que es necesaria la construcción de una escultura que honre el pasado de ese lugar, con la encubierta ganancia monetaria de la recaudación. Según el autor de la novela, logra su objetivo de tal suerte que hasta el gobernador acude a la develación del monumento.
La película del Héroe Desconocido viene a esta mesa de trabajo, luego regresar de la fronteriza Matamoros el pasado lunes 23 de septiembre, encontrando a una ciudad llena de mucha vigilancia militar y la carretera a Cd. Victoria, con abundante circulación vehicular de las fuerzas armadas.
La sorpresa es que las redes sociales y la radio local y nacional informan de la llegada de ¿despedida? del presidente López a tierras tamaulipecas, aunque la movilización militar, naval, de la Guardia Nacional y Estatal se debe a la seguridad de funcionarios nacionales y estatales que vienen a dar fe de la inauguración de la escultura de un nuevo héroe tamaulipeco: Catarino Erasmo Garza Rodríguez (1859-1895).
Buscando información del Nuevo Héroe, veo que fue periodista y murió antes de iniciada la revolución mexicana (20 de noviembre de 1910), aunque hoy la 4T le da la categoría de ‘héroe’, porque reconocen publicó en periódicos de Estados Unidos, sus ideas contra Don Porfirio Díaz.
Fundó grupos contra Porfirio Díaz y de ayuda mutua; tuvo la aventura de organizar su “Revolución Garza” muy cerca de la frontera de Texas, aunque después del fracasodo intento revolucionario en Texas, Catarino Erasmo Garza huyó a Costa Rica, donde se unió a otro grupo de revolucionarios, pero fue asesinado en Panamá a la edad de 35 años.
Catarino Erasmo Garza Rodríguez asistió al Colegio San Juan de los Esteros en Matamoros. Sirvió en la Guardia Nacional, pero se mudó a los Estados Unidos en 1877, donde se casó con Carolina Connor y tuvo dos hijas.
Los biógrafos de Garza Rodríguez aseguran que el mexicano, desde joven nunca vivió en su ciudad natal, Matamoros, aunque lo ubican con residencia en varias ciudades estadounidenses como Brownsville, Laredo, San Antonio y San Louis.
En coautoría con Gabriel Botello publicaron El Libre Pensador (1887), en un pueblo llamado Palito Blanco, al sur de Texas. El texto pretendió crear conciencia sobre la brutalidad de la dictadura del Porfiriato y su extensión en Coahuila a través del gobernador José María Garza Galán.
Las consecuencias es que el periódico y el equipo de Garza fueron confiscados, además de ser acusado de difamación con condena de 31 días de cárcel. Garza reanudó la publicación de sus escritos críticos en diciembre de 1887 después de mudarse a Corpus Christi, Texas.
Los escritos del nuevo Héroe de Matamoros fueron también por los abusos de los Rangers de Texas contra los mexicoamericanos en 1888, aunque fue arrestado por el capitán de los Rangers de Texas, John R. Hughes, acusado de difamación por su cobertura periodística del asesinato de Abraham Reséndez por el Ranger Víctor Sebree, Garza fue llevado a la ciudad de Rio Grande, donde el oficial Sebree le disparó y lo hirió.
En 1888 Catarino Garza, El Héroe Desconocido, inició su autobiografía, La Lógica de los Hechos, donde detalla su vida en Estados Unidos y la violencia extrema que experimentaron los mexicanos y los mexicoamericanos en Texas.
Estos y otros datos permiten concluir que Don Catarino Garza pudo haber sido reconocido en Texas, porque en Matamoros no se destacó como su lucha en tierras estadounidense.
Llamó la atención que el que gobierno federal gastó una cantidad de dinero (¿millones?) para localizar, identificar y trasladar sus restos a Matamoros de un personaje que brilló más por su lucha gringa que por la mexicana.
¿Vale la pena la inversión financiera y de recursos humanos para una ceremonia que en realidad no es nacional?
Reflexiono en los litros de gasolina, sueldo del personal y desde luego lo que pueda generar la logística de la inauguración de la escultura y la ceremonia para develar la imagen de un tamaulipeco por accidente, cuya lucha más se dio en el extranjero que en su país natal.
Se sabe que en 2024 el gobierno del presidente mexicano aprobó el envío de 80 militares (60 navales y 20 soldados) especialistas en antropología forense, a la Provincia de Bocas del Toro en Panamá, los que zarparon de Veracruz en el buque Huasteco, a la buscar y trasladar los restos de Catarino a México.
Finalmente, el 23 de septiembre de 2024, el presidente López y la presidenta Claudia Sheinbaum así como el gobernador Américo Villarreal inauguraron un monumento póstumo donde están los restos del revolucionario, en la Puerta México de H. Matamoros Tamaulipas.
