No hay duda de que el presupuesto de 2025 tiene muchas aristas en su quehacer, decir y ejercer, para muchos mexicanos, el aumento del gasto social no es compartido por el secretario de hacienda, porque él sabe que esto no lleva a buen puerto; Rogelio Ramírez de la O, quería empatar en el 2025 el déficit fiscal del 6% del PIB, que trae arrastrando el país, y no esperar a que los remanentes del Banco de México se definan a mediados del año que entra.
No fue posible porque la instrucción del antecesor para la presidenta Claudia Sheinbaum, fue que el gasto social no se toca y si se aumente en la medida de lo posible, no hay mucho por analizar, la situación financiera del país y las deudas millonarias adquiridas por el gobierno anterior, con un tufo de populismo, que presumían cero deuda, han dejado a la actual ejecutiva con poco marguen de maniobra y con compromisos como la obras faraónicas que terminar, a donde se siguen mandando recursos como barril sin fondo.
La deuda pública dejada por el anterior sexenio, supera por mucho a la deuda de las últimas cuatro administraciones de Zedillo a Peña Nieto; y con este costo poco se pueden esperar estados y municipios de recibir más presupuesto, en los hechos se le pide a estados y municipios bajarle un 5% de su gasto en todos los segmentos.
No hay dinero que alcance, mire PEMEX, sigue siendo en los dichos la empresa productiva del estado, pero no deja ganancias, en su lugar se le inyectan para el año que entra, 150 mil millones de pesos, que sepa a donde irán a parar, porque aún sigue la demanda d pago de proveedores en el golfo de México.
Pero mientras Pemex se hunde en Reynosa se compran tubos que nunca se usaron, y ahora son donados por la paraestatal para fabricar bardas de escuelas y portones decorativos, además en Veracruz, hay miles de contenedores abandonados a su suerte en las refinerías y petroquímicas, la lapidación de los recursos en el sexenio anterior estuvo a la orden del día.
Pero no solo eso en el Infonavit, destino del anterior jefe de Pemex, siguen construyendo casas de intereses social, dejando sin usar más de 7 mil casas abandonadas en Reynosa, unas 4 mil en Matamoros y así podemos echar números, esta sería una buena oferta del Instituto de Vivienda, si la visión fuera una restructuración de fondo.
Las ciudades siguen creciendo la demanda de servicios en Reynosa, Matamoros, Nuevo Laredo, sigue en aumento, pero el presupuesto a excepción de Laredo sigue llegando menos, y por eso se tienen que implementar programas para recaudar recursos propios de estas ciudades que si son afectadas en el fondo por el recorte presupuestal de la federación.
De las ciudades pequeñas poco podemos decir, si ya la situación era precaria, con el recorte de 2025, el sufrimiento será peor, pero hay les va otra buena, les llegaran más recursos con programas sociales, aunque estos no mejoren nada la ciudad, solo aumenten el consumo y en términos reales no acaben con el índice de pobreza en México.
2025, se ve muy cerca, la economía a entrado en una desaceleración, que el gobierno no quiere aceptar, pero los mexicanos de a pie, sabemos que el dinero circulante es poco, y se ve en los negocios y fuentes de empleo.
Es cuánto.
De Aquello y lo demás…
Mire la guerra intestina de los diputados locales en contra del alcalde Carlos Peña Ortiz, no tiene precedente, el edil ganador por 151 mil votos, quizá levanto las cejas del morenismo central y eso le valido que más y más adversarios políticos le salgan todos los días.
Los diputados locales reynosenses en vez de estar luchando para que el presupuesto de 2025 tenga a Reynosa en su más alta prioridad están en una lucha política, sin razón y sin sentido.
Son atribuciones del cabildo proponer y disponer reglamentos internos, pero los diputados en busca de reflectores asumen un rol que no les corresponde, aunado a eso está en la mesa el presupuesto 2025 y ahí es donde se necesita su lucha, para que a Reynosa le vaya mejor, pero su afán protagónico, los lleva a perder la brújula para que fuesen electos.
Carlos Peña Ortiz, como alcalde ha tenido proyectos viables, como que las empresas aporten al municipio donde hacen sus negocios y donde obtienen ganancias, como debe de ser, esto molesto a los diputados locales, que se envolvieron en la bandera ciudadana, y se quieren arrojar la vacío, pero sin propuesta, sin ningún proyecto para la ciudad, solo con el afán de bloquear al alcalde políticamente.