Madero, Tamaulipas.-La aplicación de la llamada “Ley Seca” durante procesos electorales debe ser evaluada con mayor detenimiento.
El regidor y comerciante Ramón Gómez Narváez, dijo que esta medida genera impactos negativos en la economía local, particularmente en negocios que combinan el servicio de alimentos con la venta de bebidas alcohólicas.
Destacó que durante el pasado fin de semana, en el marco de las elecciones para jueces y magistrados, se impuso la restricción temporal en la venta de alcohol, lo que derivó en afectaciones directas para restaurantes, bares y otros establecimientos cuyo ingreso depende parcialmente del consumo de estas bebidas.
Mencionó que la medida —aunque respaldada por disposiciones legales— debe analizarse con un enfoque más equilibrado.
“Se deben ponderar los efectos económicos de estas restricciones, sobre todo en elecciones que no generan una participación masiva o que no representan riesgos evidentes para el orden público”.
Indicó la necesidad de revisar la conveniencia de imponer la Ley Seca de forma generalizada, buscando mecanismos que permitan garantizar la legalidad del proceso electoral sin afectar de manera desproporcionada a los sectores productivos.