-Califica elección judicial como decisión del, ‘pueblo’.
Nuevo Laredo, Tamaulipas.-El presidente del Senado de la República, Gerardo Fernández Noroña visitó Nuevo Laredo la tarde de este viernes, y ante cerca de 400 personas reunidas en un salón de eventos se refirió a las elecciones del uno de junio y al próximo presidente de la Corte, Hugo Aguilar Ortiz, al decir: “¿Cuándo un indígena mixteco por muy preparado que estuviera, iba a ser presidente de la Corte? Nunca”.
Luego se refirió a Lenia Batres como la próxima presidenta de la Corte, y muy a su estilo de ‘destapar’ a personajes de Morena dijo que una vez que Batres termine su período, la próxima presidenta será Jazmín Esquivel, para después ocupar ese cargo María Estela Ríos, todas del partido Morena.
A esta gira por algunos municipios de Tamaulipas y que inició en esta frontera, le acompañaron los senadores tamaulipecos Olga Sosa, Maki Ortiz y José Ramón Gómez Leal, a quienes Fernández Noroña calificó de estupendos senadoras de la 4-T, los que fueron vitoreados por una muchedumbre que fue llevada en grupos de varias personas, aunque algunos llegaron en sus vehículos y otros caminando.
Durante su discurso el presidente del Senado abusó de las groserías y de las palabras altisonantes, ya que quiso darse baño de pueblo al demostrar su cercanía con los que acudieron a verlo al llamarlos ‘pueblo’.
Durante el evento y previo al discurso de Fernández Noroña, la senadora Maki Ortiz le dijo al presidente del Senado: “Debo reconocer que yo a usted no lo conocía. Sabía de oídas que eras un revoltoso…pero cuando llegué al Senado conocí al senador Noroña de verdad”, tal vez porque en ese momento recordó que el 6 de febrero del 2019 dicho personaje de Morena le dijo ‘Pedorra’ por un presunto mal trabajo cuando era alcaldesa de Reynosa por el Partido Acción Nacional (PAN). En ese entonces Fernández Noroña era diputado federal por el PT.
Al referirse a la oposición, los calificó de ‘culebras’ y miserable, para luego referirse a los migrantes mexicanos que son agredidos y detenidos en Estados Unidos por su color de piel, al mencionar que “todo ser humano tiene derecho a la vida y a la libertad”.
La cita en dicho salón era a las 3 de la tarde, pero el senador llegó casi a las 4 y media a bordo de una camioneta de color blanco, y justo cuando bajaba del vehículo fue abordado por algunos periodistas que le lanzaron algunas preguntas, pero de manera descortés no les hizo caso y siguió avanzando hacia el recinto.
En un momento se detuvo, y sin hacer caso a las preguntas de los reporteros buscaba afanosamente a la senadora Olga Sosa. “¿En dónde está Olga…Olga espérame”, le dijo mientras arengaba a los periodistas a que si querían la entrevista tenían que ser hasta que terminara el evento.
