Generación ‘Z’ mostrará su músculo
- El sueño político se manifestará
- Tragedia de Uruapan forjó el movimiento ‘Z’
- Nuevo Laredo tendrá su marcha ‘Z’
Mañana será un día importante para el país y, sobre todo para los mexicanos que aún creen que la paz, la seguridad, la tranquilidad, la libertad de expresión y de prensa, son sinónimo del remedo de democracia que practica Morena y no una utopía, ya que se organiza una mega manifestación pacífica en la ciudad de México, con réplicas menores en diferentes ciudades del país.
Se trata de un movimiento social independiente, organizado de manera improvisada y aleatoria para demostrarle y mostrarle al gobierno que en este país el que gobierna es en realidad un pueblo que aún no despierta ni se ha manifestado en contra de las injusticias, no aquel pueblo obediente, el pueblo bueno y sabio que el ex presidente López Obrador bautizó y amamantó con una peligrosa narrativa de sumisión.
Según las fuentes que lo dan a conocer, no será una manifestación política, aunque habrá políticos que se filtrarán; tampoco será una marcha de jóvenes porque habrá muchos adultos que caminarán a su lado.
Se prevé que no será pacífica porque habrá revoltosos que aprovecharán la ocasión para hacer sus desmanes y como siempre ocurre con la narrativa oficial de todos los tiempos, se le echará la culpa a la oposición, a los que critican al sistema y al ‘Estatus Quo’, a quienes están siempre inconformes con el gobierno, al fin y al cabo a ellos siempre se les echará la culpa de todos los males del país.
Pero la manifestación de mañana será también un movimiento que soltará ambiciones, proyectos, ilusiones, anhelos, deseos, aspiraciones y, sobre todo un ansiado sueño político que la mayoría de los mexicanos aspira conseguir.
Mañana se concretará tal vez, la realidad mexicana en una visión idealizada de una sociedad netamente política y politizada ante la ausencia de políticas gubernamentales efectivas y ante la inactividad de un gobierno populista que tiene estancado el progreso y las libertades plenas de una sociedad que desea un verdadero bienestar social que aún no se ha conseguido, pese a la verborrea cotidiana de que en México se vive feliz y con tranquilidad, gracias a un hastiado mandato presidencial.
El ideal político que mañana sentará las bases, tal vez de un México mejor, será el de un sueño compartido por millones de mexicanos que despertaron con la tragedia de Uruapan, con la tragedia de la muerte inútil de un mártir al que el poder nunca escuchó ni apoyó, hasta que la muerte le arrebató la vida a Carlos Manzo, esa muerte que con un tenue y sutil susurro tocó a las puertas del Palacio Nacional.
El sueño político de mañana sábado no aspira a la toma del poder, tampoco al derrocamiento de una oligarquía disfrazada de pueblo, mucho menos a un cambio de régimen.
Tal vez lo que busque sea romper con la pasividad gubernamental y el derrocamiento de la inseguridad; romper con la ausencia del progreso social y político, aunque sus demandas choquen necesariamente con el escudo de un bienestar oficial trillado por un discurso y una narrativa mil veces repetida.
Pero recordemos que los sueños en política se convierten en realidad cuando se cree en ellos, porque la potencia de los sueños es tan poderosa que soñando mil sueños a la vez se hacen reales y convierten la fantasía en una realidad permanente.
Así, la marcha/manifestación pacífica convocada para mañana en la capital del país por la Generación ‘Z’ se replicará en esta ciudad convocada por la Red Juvenil por Tamaulipas, y será una rodada que reunirá a jóvenes de todas las edades que acudirán en moto, bicicleta, triciclo, patines, patineta y todo lo que tenga ruedas, con la única finalidad de hacer sentir ese deseo de un verdadero cambio en nuestras instituciones políticas y sociales, para terminar en el monumento a Benito Juárez.
¿Será posible conseguir ese sueño político amigos lectores? Ustedes tienen la respuesta