Carlos Peña Palacios/EnLíneaDIRECTA
Reynosa, Tamaulipas.- La adolescencia es un proceso que te acerca a la madurez, pero en muchas de las ocasiones son las situaciones de la vida quienes aceleran una edad adulta junto con sus consecuencias.
“La niña ingresó al hospital general por un síndrome de desnutrición severa, aparentemente hay una omisión, una negligencia en los cuidados de la menor; la madre de la menor es una jovencita de apenas catorce años de edad y el padre de 21“, dijo en un reporte Carlos García Juárez, procurador de la Defensa del Menor y la Familia.
María apenas tiene 14 años de edad y su vida ha dejado de contar al traer al mundo a esta bebita, que le ha obligado a olvidarse de su pubertad para responsabilizarse de sus cuidados ya de por sí, pocos por su inexperiencia.
“Me siento mal por tener así a mi hija y no poderla ayudar, tiene una infección en el estómago y tiene desnutrición porque de hecho el pecho no me está saliendo a mí, sí se lo doy pero no le sale, de qué le sirve que se lo meta, no le cayó la leche NAN y por eso no ae ha desarrollado lo suficiente”, dijo María Guadalupe Hernández López.
Al ver que ni siquiera puede sostenerla en brazos al presentar un cuadro drástico en desnutrición, la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia contempla el retiro de la hija de su madre para la seguridad de la menor, informó el funcionario.
“Lo que preferimos es una asistencia social para tratar de sacar adelante estos menores que padecen este tipo de situaciones o sufrimientos.“
Ante ello, María, próxima a cumplir sus XV años de edad, considera difícil la decisión de entregar a su propia hija en manos del DIF Municipal pero a la misma vez necesario.
“A veces quiero salir huyendo y corriendo y dejársela aquí pero, luego me pongo a pesar que ella me necesita, si me dolió para tenerla y luego para abandonarla porque no fue cesárea fue normal, me dolió, sí sentiría feo que me la quiten“, añade a punto de lágrimas.