– También solicitaron el pago de su salario
– Presentaron demanda laboral y penal
Juanita del Ángel/EnLíneaDIRECTA
Tampico, Tamaulipas.-Por exigir rendición de cuentas y el pago de su salario, 10 socios y empleados del Gremio Unido de Alijadores fueron suspendidos de su labor, por lo que ya presentaron su demanda laboral en la Junta de Conciliación, así como también interpusieron una demanda penal federal en contra de quien resulte responsable por la venta de los bienes del mismo sin autorización de la asamblea.
Cenovio Molar Molar, quien desde hace 28 años es socio de la cooperativa Gremio Unido de Alijadores, indicó que estaba de auxiliar en el departamento de compras, pero lo suspendieron y le comunicaron que después le iban a pagar, pero así los han traído desde enero de este año.
“Estamos suspendidos por que exigimos que se nos pagara nuestro salario y además que nos rindiera cuentas el Consejo de Administración, que lo preside el señor Ramón Martínez del Ángel, hay compañeros que les deben 17 ó 18 quincenas, a mi desde abril que no me pagan”.
Señaló que primero metieron una demanda laboral a la Profedet, pero las autoridades de esta dependencia se declararon incompetentes y por eso acudieron a la Junta de Conciliación para interponer una demanda laboral en el mes de septiembre de este año y la cita para comparecer la tienen para el 23 de abril del 2010.
Refirió que los suspendidos son 10, entre socios de la cooperativa y trabajadores, decisión que se tomó durante una asamblea, presuntamente manipulada por el presidente del Consejo Administrativo del Gremio Unido de Alijadores, quien prohibió a sus demás compañeros que los apoyaran y sólo argumentaron que le habían hecho daño a la cooperativa, cuando sólo exigieron rendición de cuentas y que se haga una auditoria.
“Ahora le presentamos la demanda penal, lo citó la PGR, es una demanda penal federal por lapidación de todos los bienes del gremio”.
Por último, enfatizó que actualmente se tienen 8 montacargas para trabajar, cuando antes se tenían más de cien montacargas, los cuales se han ido vendiendo, así como propiedades que se han ido vendiendo, entre ellas seis lotes del margen del río Pánuco del lado veracruzano, en la cantidad de 36 millones de pesos; además, hay un promedio de 300 empleados a los que no se les ha pagado su salario desde hace mucho tiempo.